La vida no se lo ha puesto fácil a Gloria Camila. Ella misma lo ha recordado al hacer balance de la que, sin duda, fue la etapa más dura tras la muerte de su madre, Rocío Jurado. Tuvo lugar a los 18 años, cuando sus dos grandes pilares estaban siendo protagonistas de su propia pesadilla. Su padre, José Ortega Cano, estaba en prisión por homicidio imprudente y su hermano, José Fernando, también se encontraba en la cárcel por robo con violencia. Estaba sola, pero aún contaba con la mujer de su progenitor: Ana María Aldón. Sin embargo, esta tomó la decisión de afincarse cerca del centro penitenciario en el que su esposo había ingresado tiempo atrás. Ya nadie estaba cerca de Gloria Camila y esta situación le llevó a una profunda depresión de la que se ha hecho eco.

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Gloria Camila y Ortega Cano

"Yo desde pequeña he sido siempre muy delgada y tampoco tenía pecho ni nada. Siempre he sido un palillo. Aunque soy latina, ya empecé a sacar mis curvas, empecé a enseñar más culo… Siempre he sido muy delgadita y nunca he tenido esa obsesión por adelgazar ni a tener buen cuerpo, porque no he considerado que tuviera mal cuerpo, la verdad. Eso sí, hasta que cumplí los 18 años…", comienza diciendo. "Pasé una etapa muy dañina. Estaba ausente. Caí en una depresión y me lo comí todo. Empecé a salir de fiesta. Ya podía ir a la discoteca y cogía mis puntitos". Tal era su ansiedad que en tan solo 2 meses aumentó más de 10 kilos, un escollo que pudo dejar atrás con su paso en 'Supervivientes'. La joven era consciente de que este salto a la palestra mediática le iba a cambiar la vida en todos los sentidos, pero ella estaba dispuesta a hacerlo. Dio el paso y ahora no se arrepiente de nada. "Pensé: ‘Puedo recuperar el dinero perdido y perder los kilos ganados". Y es que unos meses antes había tenido que echar el cierre a su otro sueño: la tienda de ropa que había montado en Sevilla.

Gloria Camila en Supervivientes

Adentrarse en la aventura selvática le permitió adelgazar 8 kilos, por lo que una vez abandonó el concurso de puso en manos de expertos para poder recuperar su peso habitual. Un nutricionista y deporte se convirtieron en la fórmula perfecta para ganar la batalla que tanto llevaba luchando. Su cambio físico era más que evidente, no obstante, para ella era un tema tabú. Ahora está completamente recuperada de sus inseguridades y lo ha demostrado contando su experiencia en primera persona a través de su Instagram. "Fui adelgazando mucho volumen. De tallas iba notando que iba bajando. Al ver que adelgazas, pues te motivas más. Acabé en una talla 34, que es una S", apunta la propia Gloria Camila.

Poco después rompió con su pareja, Kiko Jiménez, una ruptura por la que una vez más mantuvo una lucha con la comida. "Mi estómago se cerró por los nervios, el malestar y el dolor que tenía dentro. La mejor dieta es dejarlo con tu pareja (...)", dice la actual colaboradora de 'Supervivientes'.