Gema Aldón se ha convertido en uno de los nombres propios de la polémica familiar que protagonizan Ana María Aldón y José Ortega Cano. La hija de la diseñadora ha irrumpido en los medios con el firme propósito de defender a su madre y cargar contra su hermanastra, Gloria Camila Ortega y lo ha hecho para quedarse, tal y como avanzó SEMANA hace unos días. En mitad de toda esta tormenta familiar y del complicado momento por el que está atravesando su madre, Gema Aldón ha decidido abrirse con sus seguidores en una conversación a la que ha tenido acceso esta revista: “Mi madre va poco a poco. Está recuperándose y poco a poco está mejor. Ya por lo menos vuelve a tener sus redes y está en Instagram”, comenzaba diciendo la sanluqueña.
Tras el fichaje de Gloria Camila por el nuevo reality de Telecinco, muchos apuntaban a Gema Aldón como una de las granjeras que compartirían experiencia con la hija del diestro. Algo que ella misma se ha apresurado a desmentir, desvelando la negociación que mantuvo con la productora hace unos días: “Yo no sé si esto puedo contarlo o no. A mí me llamaron para entrar en ‘Pesadilla en el Paraíso’ pero yo no quiero ir a ningún reality ahora mismo. Yo no voy a dejar a mi niña sola dos meses, el año que viene igual… Mi meta es abrir mi propio tanatorio, mi vida no es como muchos quieren pintar de 'seguro que sigue hablando, quiere ir a un reality'. No hija, no. Si yo quisiera ir a un reality en 10 años me han ofrecido infinidad de cosas y hubiese podido hablar lo que no hay en los escritos”, confesaba.E iba un paso más allá y se postulaba como una de las posibles estrellas de la próxima edición de ‘Supervivientes': “Para entrar en un reality… yo no me metería en una casa. Lo que realmente me encantaría es ir a 'Supervivientes', he visto todas y cada una de las ediciones y eso sí que me gustaría. Me encantaría, de verdad. Pero… yo también tengo problemas y debo solucionar una serie de cosas antes de ir a un sitio así".
¿Pero a qué problemas se refiere? La hija de la colaboradora decidía confesarlos por primera vez: “Yo tengo problemas de alimentación y no se puede ir a la isla con esta serie de problemas. Tengo que coger por lo menos 20 kilos, si no 30”. Aunque estaba verbalizando por primera vez el infierno que ha tenido que vivir en los últimos años, se mostraba cauta: “Ahora mismo no me siento muy cómoda hablando de mis problemas, supongo que es un proceso y que cuando me sienta más segura hablaré de ello. Tuve una etapa de mi vida en la que no me encontraba bien conmigo misma, me sentía mal y… no tenía ganas de enfrentarme a un directo. De momento, no me siento cómoda contándolo, espero recuperar la seguridad en mí misma y poder seguir haciendo cosas que antes no hacía”.Una de esas cosas es sentarse en un plató de televisión, algo que hizo hace unas semanas en Deluxe y que muchos no terminaban de entender por qué no lo hacía antes. La propia Gema ha querido explicarlo con absoluta sinceridad: “No me veía bien en la tele, Todo el mundo me dice que lo hice muy bien pero yo estaba de nerviosa… lo más grande. Mee quedaba cogida, parada y me daba muchísima vergüenza. No era la primera vez que iba, eh… pero estaba como un flan. Los pies y las piernas me temblaban estando en plató”. Su presencia en el plató de Sálvame le imponía, ya que es una espectadora fiel de este tipo de formatos: “Estoy al día de lo que cuenta Rocío Carrasco. Todo el mundo queremos verla. La primera docuserie la vi entera y bua… (para y coge aire) lloré lo más grande con ella. Estoy esperando a que por fin se emita en abierto”.
Pero evidentemente, el tema más recurrente es el de la situación por la que atraviesa ahora su propia familia. Y es que ella quiere contar su verdad, narrar su experiencia y no está dispuesta a que se manipulen sus palabras, tergiversando la realidad: “En 10 años que llevo en la familia… pasan muchas cosas, pero bueno. Mi madre siempre ha estado al lado de su marido, hasta cuando estuvo en la cárcel. Que nos fuimos para estar con él en Zaragoza. Yo y ella”. E insiste: “Yo y ella”. El énfasis de Gema a la hora de hablar de quién estuvo con el torero cuando este ingresó en la cárcel es clave. Para nadie ha pasado inadvertida su aclaración.