Rocío Carrasco ha generado un auténtico vendaval de reacciones tras la emisión de su documental 'Rocío. Contar la verdad para seguir viva'. La hija de la recordada Rocío Jurado está citando muchos nombre en su discurso algunos de los cuales van tomando la palabra y explicando su versión. Uno de los últimos ha sido Javier Urra, ex Defensor del Menor, a quien recurrió en el año 2000 para velar por el bienestar de sus dos hijos, Rocío y David Flores.
La protagonista del documental recordó que había denunciado que Antonio David Flores mantenía una sobreexposición en los medios de comunicación con sus hijos. "Pido ayuda al Defensor del Menor, Javier Urra. Él se limita a decirme las opciones legales que tengo, epígrafes del código civil que yo ya sabía. Nadie me ayudó", afirmó al respecto. Javier Urra se ha manifestado a través de una entrevista con 'Vanitatis'. "Cuando Rocío Carrasco habla de la institución y dice que no la atendimos, entiendo lo que quiere decir, porque ella no se vio satisfecha en lo que quería”, ha señalado.
El Doctor en Psicología ha recordado que ningún Defensor del Menor puede hacer nada cuando el caso ya está judicializado. Además, ha contradicho a Rocío Carrasco. “Intervine muchísimo. Me fui a ver al fiscal jefe, que luego fue ministro de Justicia, Mariano Bermejo. Nos reunimos con el fiscal de sala de menores". Ha contado que mandaron una circular a todos los medios de comunicación con el único objetivo de que se respetaba la intimidad de los niños. Posteriormente, comenzó a modificar la ley de protección del menor para que cambiasen muchas cosas. Confesaba que presentó diversiones acciones ante la Asamblea como una aceleración del proceso de separación o una mediación.
Un importante cambio
Rocío Carrasco ha dado nuevos detalles sobre la dura separación que vivió y la batalla legal que inició entonces por la custodia de sus hijos. En el sexto episodio de su docu-serie, Rocío Carrasco mostró un informe psicológico sobre sus hijos cuando eran menores. «A juicio de la madre, una niña expresiva y cariñosa que no ha planteado ningún problema (…) a su hermano le coge, le protege y le defiende y está pendiente de él en todos los aspectos. Con su madre se identifica, se siente elegida, segura». Unos aspectos que se examinaron por expertos.
Explicó que todo cambió el día que su hija comienza a tener pesadillas. Entonces reparó de la supuesta "manipulación" de Antonio David Flores. "Ahí ya estaba empezando la semilla del mal, ahí ya estaba haciéndole daño a su hija", afirmó. «Rocío empezó a perder la capacidad de atención, tiende a imponer su voluntad. El perfil psicológico de la niña, con tan solo cinco añitos, empieza a cambiar de forma drástica».