Ernesto de Hannover se ha citado con su pareja, Claudia Stilianopoulos, y con su hijo, en Madrid tras la discusión publicada en exclusiva en SEMANA.
Ernesto de Hannover vuelve a la palestra mediática tras la discusión que publicó SEMANA en exclusiva con su pareja, Claudia Stilianopoulos. Entonces, se hizo evidente la tensión que vivieron durante una cena, sin embargo, ahora vuelve a reinar la paz entre ellos. Lo demuestran las imágenes que acaban de ver la luz, pues los dos han disfrutado de un almuerzo en el que no dejaron de bromear y charlar sobre la vida. No obstante, no fueron los únicos integrantes de la comida, ya que también comieron junto al hijo de Ernesto, Christian, quien también reside en Madrid. Lo que es una incógnita es si han hablado sobre el juicio que tiene abierto con su hijo, una guerra que comenzó después de que el Príncipe acusara a uno de sus hijos de vender parte del patrimonio sin consultárselo previamente.
Hace tan solo comenzó el proceso que enfrenta a los Hannover, siendo el Tribual Regional de la capital de Baja Sajonia quien se ocupaba del caso. La intención de Ernesto de Hannover es retirar la herencia que dio por adelantado a sus hijos, una decisión que tomó en el año 2004 tras reconocer su dependencia del alcohol. A pesar de que todo parecía ir sobre ruedas, en el año 2018 Ernesto Jr quiso ceder el palacio de Marienburg, la residencia familiar histórica al Estado por los altísimos gastos que suponían su reforma y el mantenimiento. Su padre no estuvo de acuerdo hasta tal punto que ahora se verán las caras en los tribunales, donde le pide que se devuelva la donación, un resarcimiento de cinco millones de euros y la devolución del palacio de Herrenhausen. Numerosos problemas son los que afronta ahora Ernesto de Hannover, aunque él los vive desde el silencio. No dio explicaciones del llamativo vídeo que descubrió esta revista y prefirió mirar hacia el otro lado para no echar más leña al fuego. A pesar de que él y Claudia quedaron con unos amigos para disfrutar de una distendida velada, horas después acabaron como el rosario de la aurora. Se dejaron llevar y así lo demostró la actitud de Ernesto, quien estaba "muy nervioso y efusivo" según explicaron algunos testigos. Tras algunos gritos por su parte, Claudia se sintió avergonzada y se fue sola en un taxi, aunque a tenor de estas imágenes se confirma que todo está genial entre ellos.
Por el momento, ha vuelto la tranquilidad a los Hannover. Quizás cuando se resuelva el juicio que le enfrenta a su hijo volverán todas las miradas a centrarse en el que fuera pareja de Carolina de Mónaco. Una espera que él lleva junto a su familia y su pareja, Claudia, con quien acaba de aprovechar una jornada familiar. En una terraza de la capital en la que estaba a la vista de todos, Ernesto, su chica y su hijo Christian vivieron un día de paz y sosiego.