La historia de desavenencias entre Elena Tablada y Javier Hungría se complica. Según ha podido saber en exclusiva Revista SEMANA, la diseñadora le habría pedido ayuda a un reconocido paparazzi de nuestro país para tratar de sacar información sobre la vida de su exmarido. La noticia se conoce la misma semana en la que la propia Elena confirmaba, en boca de la periodista Almudena del Pozo, que sí había contratado a un detective privado para que siguiera al padre de su hija Camila. Este nuevo giro de los acontecimientos viene a respaldar lo que era un secreto a voces desde la ruptura del matrimonio: los recelos de la ex de David Bisbal respecto a quien fuera su pareja.
Elena Tablada quería saber qué hacía su exmarido y cuándo
Respecto a los tiempos, la petición de Elena al citado reportero se produjo antes de contratar al detective. Es decir, una vez ella y Javier Ungría decidieron seguir caminos por separado, no antes. Con ello, buscaba obtener detalles sobre su nueva vida. Desde dónde iba, qué hacía, con quién se reunía y si se veía con alguien. Entendemos que el seguimiento no dio los frutos deseados, de ahí que se decidiera a echar mano de un profesional capaz de seguirle los pasos a su exmarido.
De la contratación de este último, Elena tampoco obtuvo ninguna revelación significativa del día a día de Javier. Por lo menos, nada que pudiera usar en el juicio que mantienen por la custodia de la hija que tienen en común. Así lo desveló Daniel Carande, primero en pronunciarse sobre el tema del detective en 'Y ahora Sonsoles', programa en el que colabora. Según el periodista, las imágenes que tendría en su poder la ex de David Bisbal "no demostrarían nada". Y añadía que solo se ve a Javier charlando amigablemente con varias camareras y algunos hombres.
Una relación cada vez más tensa
Lo único que se puede sacar en claro de esta última información a la que ha tenido acceso en exclusiva SEMANA es que, desde su separación, Elena ha estado muy enfocada en saber qué hacía Ungría. La pareja se divorciaba en agosto del año pasado, tan solo cuatro años después de darse el 'sí, quiero' en Cuba. El proceso judicial que mantienen por la custodia de la niña no ha hecho más que multiplicar las desavenencias entre ambos. Están a la espera de que se conozca la nueva fecha para la celebración del juicio. Previsiblemente, tendrá lugar antes de que acabe el año.
Tampoco ha ayudado a calmar las aguas el cruce de declaraciones que el extinto matrimonio se ha dedicado en las últimas semanas. La diseñadora ha confesado en numerosas ocasiones que solo quiere que esta situación se solucione y que sus hijas puedan crecer juntas y felices. Recordemos que Elena Tablada es madre de otra niña, Ella, fruto de su relación con David Bisbal.