La vuelta de Ana Obregón a la televisión ha sido un auténtico bombazo. Semanas después de que la actriz revelara que estaba de retiro, confirmó el paso que había decidido dar. La intérprete había aceptado presentar las Campanadas junto a Anne Igartiburu, un programa que supondrá el retorno de Ana después de vivir su etapa más dura. Seis meses después de hacer frente a la muerte de su hijo, Álex Lequiose ha descubierto cómo está Ana, a pesar de esta oferta de trabajo. Su hermano Javier lo ha descubierto en el funeral de Carlos Catalán al que fue a despedir y es que su familia no se ha separado de ella en todo este tiempo. Su verdadera situación la ha confesado a los micrófonos de Europa Press.

Desde que muriera el joven empresario a los 27 años el pasado 13 de mayo ya nada ha vuelto a ser lo mismo en su familia. Mientras su padre, Alessandro Lequio, se refugió en el trabajo y volvió como colaboradora a 'El programa de Ana Rosa', Ana Obregón quiso tomárselo con más calma y parar en seco todo para centrarse en su recuperación. A su lado han estado tanto sus padres como sus hermanos, pilares que han sido fundamentales en este durísimo proceso en el que todavía se encuentra.

A través de sus redes sociales hemos sido conscientes de cómo se encontraba, así como de todo lo que añoraba la vida que tenía junto a su hijo Álex Lequio. El hijo de Ana y Alessandro dejó una impronta en los suyos, hecho que se ha reflejado tras su partida, pues continuamente los perfiles de amigos y familiares de Álex escriben mensajes para honrar su memoria.