Aunque septiembre ya ha dado el pistoletazo de salida, hay algunos famosos que siguen aprovechando sus últimos días del verano para lucir sus cuerpos al sol. Este es el caso de la modelo Esther Cañadas. La maniquí, toda una enamorada de Ibiza, ha sido pillada en la isla pitusa disfrutando de un agradable paseo en barco. La albaceteña, que está disfrutando de unos días de desconexión con su nueva pareja, se resiste a volver a la rutina y buena muestra de ello es el espectacular moreno que se le ha quedado, tras llevar más de un mes en la isla.

A sus 43 años, Esther Cañadas puede presumir de lucir una estupenda figura. Con un mini bikini color azul, la actriz se ha dejado ver a bordo de un barco, mostrando un envidiable moreno. Acostumbrados a verla con tes blanca, Cañadas ha sorprendido con sus marcas de bronceado y una envidiable forma física. La maniquí se ha dedicado todo el mes de agosto a disfrutar del sol ibicenco y a juzgar por las imágenes, tantas horas al sol han dado su resultado. Tal y como adelantó en exclusiva SEMANA, fuimos testigos ya hace unas semanas de lo bien que se lo estaba pasando Esther en el Chiringuito Cala Gracioneta (Ibiza), en compañía de su nueva pareja. Un restaurante ubicado en primera línea de mar, y al alcance de muy pocos.

esther cañadas verano

Tras romper con el magnate hotelero Chatwal en el año 2013, la modelo ha vuelto a recuperar la ilusión en los brazos de este escultural español. Por ahora se desconocen más detalles sobre quién ocupa el corazón de Esther, ya que la celebrity no ha querido hacerle mención alguna en las redes sociales, en donde acumula más de 17 mil seguidores. La modelo sólo utiliza su Instagram para colgar fotografías de sus años dorados sobre las pasarelas, un terreno que ha vuelto a pisar recientemente.

Y es que hace algunos meses la albaceteña volvió a desfilar después de varios años sin pisar una pasarela. El pasado mes de febrero Cañadas cerró el desfile de Balmain tras una larga temporada inactiva en este ámbito, instante en el que demostró que su actitud y talento permanecen completamente intactos desde que comenzara en esta industria. Visiblemente más delgada y con paso firme, la maniquí volvió al lugar que la encumbró y que, además, la convirtió en la musa de los mejores diseñadores y fotógrafos.

Esther Cañadas

El punto de inflexión de Esther Cañadas llegó en el 2014 cuando, tras superar una enfermedad del sistema inmunológico que la obligó a mantener una medicación de cortisona durante 5 años, decidió adoptar a una niña y convertirse en madre primeriza. Actualmente, la maniquí vive en Estados Unidos y aprovecha cada oportunidad para visitar su país y de paso, darse un chapuzón en aguas ibicencas, de la que es toda una enamorada.