Daniel Sancho se encuentra en prisión provisional en la cárcel de Koh Samui (Tailandia). A la espera de que le den una fecha de juicio, el hijo de Rodolfo Sancho está tratando de digerir cómo será su vida a partir de ahora. "Está en tratamiento psicológico", decían desde el centro penitenciario. Puede ser condenado a cadena perpetua o cadena de muerte, dos escenarios nada halagüeños en los que no deja de pensar. Así lo refleja que incluso haya pedido a su entorno que "se olviden de él", algo que por supuesto será incapaz de hacer su familia. Sus padres tienen claro que no le dejarán solo, buena prueba de ello, que Rodolfo Sancho se encuentre en Tailandia para no solo apoyarle, sino también reunirse con sus representantes legales. Pero, ¿cuál es el calendario al que deberá acogerse a partir de ahora? Aunque son pocas las fechas que hay marcadas, sí que hay algo claro: su detención ordinaria. El día 17 de agosto dejará de estar en prisión provisional y se oficializará su detención ordinaria, siendo en ese momento cuando tendrá que esperar a que el tribunal decida sobre su caso.

Daniel Sancho se disculpa del crimen
Daniel Sancho se disculpa por el crimen. (Foto: La Sexta)

Daniel Sancho y varias fechas en las que se decidirá su futuro

La segunda fecha que Daniel Sancho debe tener en cuenta es el mes de noviembre. Así lo recoge la ley tailandesa, donde se dice que hay un plazo máximo de 84 días hasta el inicio del juicio desde que el preso está en régimen ordinario de detención. Esto deja ver que en aproximadamente 13 semanas el juicio en el que se juzgue a Daniel Sancho debería comenzar, una espera a la que él trata de hacer frente "haciendo Yoga en su celda", tal y como han revelado desde la prisión en la que ingresó. Eso sí, lo que es una incógnita es cuándo podría saberse es cuándo terminará este proceso que ya está en boca de todos, a pesar de ni siquiera haber comenzado. «El proceso del juicio puede ser largo en los casos de asesinato y descuartizamiento», ha comentado expertos.La policía tailandesa cree tener suficiente indicios y pruebas contra Daniel Sancho por la muerte de Edwin Arrieta, cirujano colombiano que su familia no ha dejado de llorar desde que se confirmara su asesinato. La hermana del médico era quien pedía en televisión que al hijo del actor se le condenara con la pena máxima y que, además, cumpla su condena en Tailandia, no siendo extraditado a España en ningún caso. Sabe que la crudeza de las cárceles de allí nada tiene que ver con las españolas y eso les hará pelear porque continúe en el país asiático el máximo plazo, algo que no depende de ella, sino del juez del caso.

Daniel Sancho con el torso al descubierto.
Daniel Sancho con el torso al descubierto. (Foto: @danisanchobanus Instagram)

Por el momento, Daniel Sancho está aislado, un protocolo que todos los reos de las cárceles siguen después del covid. Debe estar así un total de 10 días, lo que le obliga a estar así hasta el día 16 de agosto. Esto significa que será un día más tarde cuando entre en la misma cárcel que el resto de presos. Hasta ese momento compartirá celda con cinco presos y se le seguirá de cerca, según han dicho las autoridades tailandesas, pero una vez comience el régimen ordinario habrá muchas más personas junto a él. Mientras él pedía vitaminas y desvelaba los nervios que le acompañan por su nueva situación, quien le acompaña en su día a día dice que Daniel Sancho "está bien". No le quedará más remedio que adaptarse al horario que rige la cárcel y a sus nuevos compañeros de vida, los otros convictos de su cárcel, un aforo que, según cuenta, no es el permitido. Tampoco el oficial.Quién sabe si finalmente será condenado. En ese caso hay muchas fuentes que apuntan que podría ingresar en la cárcel 'Bangkok Hilton', un centro donde hay muchos extranjeros y donde están gran parte de los condenados a pena de muerte. Esta opción querría ser evitada tanto por su abogado como por su familia, ya que sus condiciones son mucho peores. "Tienen que llevar grilletes de más de cuatro kilos en sus piernas los primeros meses", asegura alguien que ha pasado varios años en su interior.