Si hay una figura clave en el seno de la familia Ortega Cano, esa es Conchi. La mayor de las hermanas de José Ortega Cano se ha convertido en todo un filón para los medios de comunicación. La que fuese peluquera en San Sebastián de los Reyes se ha mostrado cómplice con todos los que han querido saber más de los conflictos que golpeaban a su familia y siempre lo ha hecho de una forma clara y directa.
“Yo lo que hago es defender a mi hermano, no hago nada malo”, dice Conchi a SEMANA cuando nos ponemos en contacto con ella. Han sido las injusticias que ha tenido que soportar su hermano pequeño las que, según ella, han propiciado que más de una vez alce su voz ante los periodistas que reclamaban su versión de la historia. Eso sí, lo ha hecho lejos de la aprobación de sus otros hermanos, que se han mostrado críticos con su actitud: “Mi familia no me ha regañado porque no me han llamado. Ni Maricarmen ni nadie. Pero bueno… que no me llame, ya me llamará. Estarán cabreados pero me da igual. Yo tengo 77 años y soy muy libre de hacer lo que yo quiera. A ver… ¿Qué pasa? ¿Que yo no tengo derecho ya con mis años después de toda la vida harta de trabajar y de sufrir de hablar con gente? Pues sí, y ya está”.
"No me encuentro bien”, confiesa Conchi tras recibir la visita sorpresa de Jorge Javier Vázquez en su casa
“Estoy regular después de lo de ayer. He ido al médico esta mañana y estoy en casa de mi hija para estar tranquila, no te digo más… Es que no me encuentro bien”, confiesa Conchi en su conversación con esta revista. Se refiere a la visita inesperada que protagonizó ayer Jorge Javier Vázquez en su propia casa. Las cámaras de 'Sálvame' entraron por primera vez en su adosado después de tantos años y ella estaba dispuesta a recibirlas: “No estaba nada preparado, yo abrí mi puerta y cuando los vi me quedé ‘pasmá’. Y al principio no estaba incómoda, no pasaba nada. Estaba muy conforme. Yo no pod��a hacer ahí otra cosa, nada más que abrirles la puerta. No iba a cerrarles la puerta, mis principios no son esos. Jorge se portó muy bien, muy risueño y muy bien conmigo. Las cosas como son. A mi nadie me trató mal ni yo lo voy a consentir, al revés. Estuvo muy bien. Lo que pasa es que ya me empezó a llamar todo el mundo y…”.
Una de esas llamadas fue la de Mari Carmen Ortega, una de sus hermanas, que no dudaba en descolgar el teléfono para intentar cortar lo que allí estaba ocurriendo. Cuando las cámaras del vespertino abandonaban la casa de la mayor de las Ortega, Mari Carmen se mostraba más crítica que nunca contra su hermana y apuntaba a uno de los reporteros del programa, Sergi Ferré: “Me parece muy feo lo que habéis hecho a mi hermana. La sangre no os corre por las venas. Me parece increíble que alguien que habla mal de mi hermano y que se pitorrea de él, le des un abrazo. Ni de mi hermano ni de mi familia se ríe nadie. Sergi ha metido el cenizo en esta familia, es tremendo lo que le ha hecho. Mi hermana se ha confiado de él, que se piense bien a quien mete en su familia”.
Conchi Ortega Cano se sincera en SEMANA
Unas durísimas palabras que han tenido contestación por parte de la propia Conchi en su conversación con SEMANA: “A Sergi parece que se lo han comido y les ha sentado mal. A él lo llamé yo para que viniese a mi casa que tenía que darle una cosa. Lo conozco desde hace muchísimos años porque venía a mi peluquería y en ningún momento hubo nada planeado”, decía antes de despedirse. No sin antes confesar que no ha todo el mundo le ha sentado igual su irrupción en el programa de Telecinco ya que sus hijas “ se han partido de risa. Me ha llamado toda mi familia de Cartagena, gente con la que hacía mucho tiempo que no hablaba. Pero vamos, no quiero más historias”.