La visita del duque de Alba a su hermano, Cayetano Martínez de Irujo, en el hospital ha dejado grandes titulares. Carlos Fitz-James Stuart no solo ha desvelado cómo se encuentra su hermano, también cuáles son los dolores que sufre tras su última intervención y las consecuencias de su ingreso. La última de ellas es el no poder asistir a la boda de su sobrino Carlos con Belén Corsini, quien contrae matrimonio este fin de semana junto a sus seres más queridos. Aunque se desconoce cuándo recibirá el alta hospitalaria, su estado de salud todavía es delicado por lo que tiene que guardar reposo y así lo demuestra su baja entre los invitados. “Por lo menos dos o tres días tiene que estar, así que no estará en la boda”, aseguró el duque de Alba a las puertas del hospital donde Cayetano está ingresado.
Un duro varapalo para él si se tiene en cuenta que le hacía una tremenda ilusión asistir a este enlace familiar. Aunque es cierto que estaba previsto que fuera íntimo y el número de invitados fuera reducido, lo que pocos imaginaban era el problema de salud al que iba a tener que hacer frente justo días antes de la boda. En esta cita nupcial además iba a reencontrarse con su hermano Carlos con el que estaba distante, sin embargo, tras su visita a la clínica se demuestra que todo vuelve a estar bien entre ellos. "Yo me llevo bien con todo el mundo”, respondía Carlos cuando era preguntado por sus rencillas familiares y su ruptura con Cayetano.
Ambos han acercado posturas de nuevo y todo apunta a que este problema de salud ha llevado a que se unan de nuevo. Cabe recordar que es la undécima vez que Cayetano tiene que pasar por quirófano por una obstrucción intestinal, lo que ha llevado a que esté muy bajo de ánimo. Hastiado de la situación y de los continuos ingresos hospitalarios, el hijo de la duquesa de Alba está deseando recuperar las riendas de su vida y descansar junto a los suyos en su casa. Quien se ha mostrado muy unida a Eugenia Martínez de Irujo es Bárbara Mirjan, pareja de Cayetano. Ambas han llegado juntas y cogidas del brazo al hospital, imagen que demuestra la buena sintonía que existe entre las cuñadas, lo que sin duda llenará de felicidad al empresario.
Cayetano Martínez de Irujo se convierte de este modo en uno de los grandes ausentes, eso sí, su familia le tendrá muy presente y entenderá a la perfección el motivo por el que no acude. Su problema de salud es una justificación más que de sobra para no ir y es que ahora debe preocuparse por él y por una evolución positiva.