Carlota Corredera le ha declarado de nuevo la guerra a los kilos, como ya hiciese hace cuatro años cuando quiso estar más feliz con su figura y perder algo de peso. Lo consiguió, pero la vida es así de caprichosa y ha vuelto a coger algo de peso. Por lo menos no ha perdido la ilusión y la confianza en sí misma, como así ha reconocido en una entrevista en exclusiva concedida a SEMANA, donde explica con ilusión que ha retomado la dieta Pronokal que un día le ayudó a cumplir su sueño.Leer más: Carlota Corredera le declara la guerra de nuevo a los kilos
Carlota Corredera, feliz pese a todo
Nada ni nadie puede quitarle la sonrisa a Carlota Corredera. El peso es algo que le preocupa, pero no le quita el sueño. Sabe que perder peso es una lucha diaria, constante, pero que tendrá éxito al haber confiado de nuevo en la dieta Pronokal que un día le ayudó a perder 60 kilos. Si dicen pronto, pero hay mucho esfuerzo detrás, aunque con esta dieta tiene la mitad del trabajo realizado, como así ha explicado la propia presentadora a SEMANA.
No le importa la palabra “gorda”
Este término puede ser utilizado de forma despectiva, pero Carlota Corredera está por encima de esto, porque para ella “depende de cómo se diga” y del contexto en el que se diga. Está feliz y tranquila. Su familia está bien, en el trabajo no tiene problemas y la salud le está dando un respiro tras un susto que recibió hace unos meses cuando se le encontró un tumor.
¿Ha tenido algún trauma por su peso?
No. Tajantemente, no. Esto lo ha querido dejar muy claro Carlota Corredera, que quiere dejar claro que la felicidad no se mide en kilos, aunque otra cuestión es la salud. “Yo considero que soy una persona gorda. Siempre he tenido problemas de peso, pero no he tenido ningún trauma, porque me lo llamaran en el colegio”, sentencia.
Los momentos más duros de su lucha
Carlota Corredera, en la misma línea, reconoce que en ocasiones su peso ha sido utilizado cuando era pequeña para tratar de hacerle daño. Eso no le ha preocupado demasiado: “Tengo recuerdos tristes con la comida, porque siempre he estado a dieta, pero no porque me insultase nadie”.
No puede darse demasiados caprichos
Carlota Corredera, para merendar en ‘Sálvame’, no puede hacer como el resto de sus compañeros y deleitar su paladar con las delicias que el público les lleva. “Tengo un metabolismo y una genética que me impiden dejarme. No es una cuestión de talla. Lo importante es tener los hábitos y no vivirlos como un drama. Cuidarse en mi caso personal es imprescindible”.
¿Y si su hija hereda su metabolismo?
Carlota Corredera confiesa a SEMANA que su hija ha sido uno de los motivos por los que ha decidido cuidarse aún más y tratar de perder algo de peso con Pronokal por cuestiones de salud: “Mi hija ha sido mi mejor motivación para cuidarme. No tengo miedo de que mi hija lo herede, porque intento que coma lo más sano posible, pero también que disfrute de las cosas que le gustan a los niños. Me preocupa que sea una niña feliz, pero lo otro no es una cosa que me condicione”.
Su insana relación con la comida
Ya en su libro ‘Tú también puedes: cómo conseguí perder 60 kilos y ganar salud’ explicaba cómo su vida vivía en un bucle incapaz de frenar de consumir comida que no le hacía ningún bien en su salud: “Mi relación con la comida siempre ha sido emocional y complicada. Tenía adicción a la comida insana”, reconocía Carlota Corredera, que al menos ha logrado comprender cuál era su problema y, con la ayuda de Pronokal, cómo llevar su deseo de recuperar la silueta en un éxito rotundo.
Sea como fuere, Carlota Corredera es feliz y eso es lo que importa