‘El Hormiguero’ empieza la semana a lo grande recibiendo en su plató a nuestro actor más internacional, Antonio Banderas. El malagueño visita el exitoso programa de Antena 3 para charlar con Pablo Motos sobre el éxito de 'Gypsy', el musical que dirige y produce, y que se representa en el Teatro Apolo de Madrid hasta el 25 de mayo. Banderas atraviesa un momento muy dulce en su carrera y vive enamorado desde hace más de una década de su pareja, la holandesa Nicole Kimpel. La guapísima empresaria fue quien le salvó la vida al actor cuando este sufrió un grave infarto de miocardio en 2017. Recordamos esta historia.
Antonio Banderas en 'El Hormiguero'.
Antena 3
Para rememorar los acontecimientos de aquel dramático episodio, debemos retroceder hasta el 26 de enero de 2017, cuando la pareja residía en Londres. La casualidad quiso que la noche anterior al infarto Nicole padeciera un dolor de cabeza. Al comprobar que no tenían analgésicos en casa, Nicole decidió salir a comprar medicamentos. Sin embargo, las farmacias cercanas estaban cerradas, por lo que tuvo que acudir a un supermercado, donde solo encontró aspirinas.
Cabe destacar que en Reino Unido este tipo de productos se vende en supermercados y, además, en presentaciones de alta dosis, como las de 5 miligramos que adquirió Nicole. Al volver a casa, se tomó una pastilla para aliviar su dolor de cabeza y dejó el resto del paquete a mano por si necesitaba otra dosis de ácido acetilsalicílico.
Este hecho, aparentemente insignificante, se convirtió en el primer eslabón de una cadena de acontecimientos que salvaría la vida de Banderas unas horas después. La aspirina, conocida por sus propiedades anticoagulantes, es un recurso médico común en situaciones de emergencia cardiovascular, aunque en ese momento ni Nicole ni Antonio podían imaginar lo crucial que resultaría al día siguiente.
El día del infarto: un reconocimiento inmediato
Continuemos con el relato. A la mañana siguiente, el 26 de enero de 2017, Antonio Banderas comenzó a sentirse mal. Según sus propias palabras, experimentó dolor en el pecho, dificultad para respirar y una sensación inequívoca de que algo grave estaba ocurriendo. "Claramente sabía lo que me estaba pasando", confesó en una entrevista en el programa de Jimmy Kimmel en la televisión estadounidense.
Al verlo en apuros y escuchar su descripción de los síntomas, Nicole no dudó en actuar con rapidez. Recordó las aspirinas que había comprado la noche anterior y, sin perder tiempo, tomó una decisión instintiva pero acertada: colocó una de las pastillas debajo de la lengua de Banderas. Este método permitió que la aspirina se absorbiera rápidamente, actuando como anticoagulante y evitando un desenlace fatal en el momento más crítico del episodio cardiovascular.
Antonio está vivo “de milagro”
Tras este primer auxilio casero, Banderas fue trasladado de urgencia a un hospital en Londres. Los médicos confirmaron que había sufrido un infarto de miocardio y le realizaron una intervención quirúrgica en la que le implantaron tres stents para restaurar el flujo sanguíneo en su corazón. Además, aprovecharon para practicarle una ablación y tratar una arritmia que padecía desde hacía tiempo.
En Youtube existen varios vídeos que recuerdan el episodio
Los profesionales sanitarios elogiaron la iniciativa de Nicole, destacando que administrarle la aspirina había sido un factor clave para minimizar el daño al corazón del actor. Este gesto les dio a los médicos un margen de maniobra fundamental para actuar con éxito. Sin esa intervención inicial, Antonio podría haber fallecido en cuestión de minutos.
Una nueva visión de la vida
Banderas recuerda este episodio con una mezcla de emoción y el humor andaluz que lo caracteriza. "Nicole me puso una de esas aspirinas debajo de la lengua y eso me salvó la vida", relata visiblemente conmovido. "Fui afortunado después de todo, porque un ataque al corazón puede matarte muy rápido. En cierto modo, es una de las mejores cosas que me han pasado en la vida, porque tuve una segunda oportunidad", añade optimista.
(Gtres)
El actor explica que el infarto lo llevó a replantearse sus prioridades. Dejó de fumar de manera radical, un hábito que él mismo calificó como "una de las cosas más estúpidas que he hecho en mi vida". Además, decidió regresar a su Málaga natal para establecerse definitivamente en España. Allí compró un ático en el centro y fundó el Teatro del Soho CaixaBank, un proyecto que refleja su deseo de volver a sus raíces y centrarse en lo que realmente importa: su familia, sus amigos y su vocación como actor y director.
Aunque Nicole, siempre discreta, mantiene un perfil bajo y rara vez habla públicamente sobre el incidente, Banderas no pierde oportunidad de reconocer su actitud en aquel momento crítico. El infarto no solo marcó un punto de inflexión en su vida, sino que también fortaleció el vínculo con su pareja.