La actriz ha recordado con una feliz foto uno de los días más especiales que ha vivido junto a su hijo: "El mar se convirtió en un mar de tu memoria".
Ana Obregón está pasando por uno de los momentos más difíciles de su vida. Con la llegada del verano, los recuerdos están más presentes que nunca en la actriz, que se tiene que enfrentar de nuevo a unas vacaciones sin su pequeño del alma y, ahora, sin su madre. La protagonista de 'Ana y los 7' ha echado la vista atrás y ha recuperado una bonita imagen en la que aparece disfrutando junto a Álex Lequio de un día de lo más especial.
Ana Obregón se ha remontado al día en el que celebró por todo lo alto la doble graduación de Álex Lequio en las playas de Miami, en concreto un 3 de julio de 2014. Hace siete años, madre e hijo disfrutaban del sol y la arena de las playas de Miami y posaban ante la cámara con una sonrisa de oreja a oreja. "A veces la vida nos atrapa en un laberinto de felicidad del que creemos que no vamos a salir nunca. Como ese día, hace 7 años, celebrando tu doble graduación en Duke University en las playas de Miami Beach", comienza a escribir.Tras este inicio, Ana Obregón se rompe y vuelve a llorar por la pérdida de su hijo, que fallecía hace poco más de un año tras una larga batalla contra el cáncer. "Ingenua… Hoy el mar se convirtió en un mar de tu memoria. Y la vida en un laberinto de tu ausencia sin salida. Sin ti. Sin tu futuro. Ni el mío", asevera.Compungida y al borde del abismo en el que se encuentra tras la muerte de su hijo y, recientemente, de su madre, la actriz recalca lo difícil que está siendo para ella vivir sin sus pilares fundamentales. "Porque esta vida ya no es vida aunque respire. Porque tú ya no estás…", sentencia. Ana Obregón hace frente a su verano más triste y continúa encontrando refugio en sus redes sociales para explicar cómo se siente ante las adversidades que le ha dado la vida.
Ana Obregón, desolada tras la pérdida de su madre
Mientras que intentaba aprender a lidiar con la vida sin su hijo, Ana Obregón recibía hace unos meses otro fuerte golpe: la muerte de su madre. Una pérdida que llegaba tan solo unos días después de que se cumpliera el aniversario de la muerte de Álex Lequio. Ante esto, la actriz puso tierra de por medio y se desplazaba hasta Mallorca, su refugio, para poder sobrellevar el duelo. Se trata de un lugar muy especial para ella y al que siempre vuelve debido a que ha sido el mejor escenario de los mejores momentos familiares y que difícilmente podrá borrar de la retina, aunque suponga un gran dolor para ella.