Ana María Aldón comienza a coger las riendas de su vida después de una etapa de profundos cambios marcada por su divorcio de José Ortega Cano. La diseñadora está ultimando su mudanza y, además, suenan rumores que podría estar de nuevo ilusionada en el plano sentimental. La propia protagonista respondía con contundencia.
"Ojalá llegara ese momento, pero no ha llegado", ha afirmado durante su intervención en el programa 'Fiesta' donde se han dado algunos detalles de un hombre con el que se la ha visto recientemente. Se trata de un atractivo señor de negocios. Ella ha desmentido tener algo más allá que una relación profesional con él. "Claro que hay un empresario que me ha ayudado a buscar la casa. Se llama Fernando Pinilla y estoy muy agradecida, me acompaña y me aguanta lo más grande. No es mi nueva ilusión. Él tiene su mujer, yo tengo mi casa y él tiene la suya. Ya bastante tiene por aguantarme". El susodicho es su representante. "Claro que pueden salir fotos. Estoy casi todos los días con él. Es un señor maravilloso, muy guapo y muy bueno. De formación es arquitecto, pero se dedica al mundo de la empresa".
Ana María Aldón está abierta al amor
La andaluza también ha dejado claro que está abierta al amor. "Yo ya tengo el duelo hecho". Incluso ha bromeado con que si llega una nueva ilusión de forma inmediata, mejor que mejor. "No tiene que pasar mucho tiempo. El tiempo no está para perderlo". Después de un año especialmente complicado en el que ha vivido una montaña rusa de emociones ahora asegura sentirse tranquila. "Sé que van a venir tiempos mejores que ahora. Aunque esté tranquila emocionalmente, tengo un estrés porque tengo mi vida embalada. Tengo mucho que hacer, pero voy a estar mejor".
Asimismo, Ana María Aldón se ha pronunciado sobre el mensaje que Gloria Camila Ortega ha lanzado en las redes sociales. Un dardo envenenado con guiño a la última canción de Shakira donde señalaba lo siguiente: "Yo también podría hacer canciones. Mujeres con nombre de vírgenes. No son como suena". Sin embargo, la colaboradora no cree que se esté refiriendo a ella. "No me siento aludida. Yo sé que ella utiliza ese tipo de frases para todo el mundo. No tiene que dirigirse hacia mí".