Amador Mohedano y Rocío Carrasco tienen una guerra abierta desde que comenzara el documental 'Rocío. Contar la verdad para seguir viva'. Una batalla que lejos de terminar, cada día se recrudece y es que las últimas declaraciones de Rociito en 'Sálvame' no han hecho otra cosa que enfadar al que fuera mánager de Rocío Jurado. Fue hace tan solo unos días cuando echó por tierra su labor como representante y le lanzó de nuevo una pulla que cabreó al hermano de la cantante. «Me hace mucha gracia lo de la carrera de Rocío Jurado… como si Rocío Jurado te hubiera necesitado a ti para tener periódicos y crónicas, mi vida», dijo. Días después la ha respondido, demostrando una vez más que no tiene pelos en la lengua. "La carrera de su madre no le ha interesado nunca", ha espetado Amador. Indignado con las palabras que su sobrina le ha dedicado en televisión, ha cargado contra ella, ya que considera que lo que le está haciendo "es una putada".
Amador está decepcionado con el cariz que ha tomado todo y considera que Rocío Carrasco es una persona desagradecida, pues él se dejó la piel para que 'La más grande' triunfara a lo largo y ancho del mundo. Aunque ella tenía talento más que de sobra, siempre contó con Amador, quien le acompañó en todas sus actuaciones. De hecho, la pasada semana Rosa Benito posteó un vídeo de Rocío Jurado en el que alababa la labor que su hermano había hecho con ella en su carrera, un vídeo con el que trató de desmontarla. Será esta semana cuando Rociito vuelva a su sección en 'Sálvame' y cuando quizás aproveche para responder a su tío y quién sabe si a Olga Moreno.
Este miércoles la malagueña responderá a todas y cada una de las cosas que hasta ahora ha dicho Rociito sobre ella, otro momentazo televisivo del que, a buen seguro, permanecerán millones de personas pendientes. El otro programa para el que sí habrá que esperar es para la segunda temporada de la docuserie de Rocío Carrasco al estrenarse en otoño. Hay muchos ojos puestos en ella, pues en ella hablará sobre la familia de su madre, entre ellos, de nuevo, de su tío Amador. Después de revelar que no le echaba en absoluto de menos, le lanzó una dura advertencia: "No tengo nada que decirle. Tendrá que esperarse a otoño". De este modo, dejó claro que entonces tendría motivos para poner el grito en el cielo, eso sí, es una incógnita qué melón se abrirá en ese momento.