Alma Cortés Bollo ha sido clara en su perfil de Instagram sobre su aventura en el programa 'Supervivientes': “He tratado de dormir, pero ha sido imposible”. Y no es la única participante del concurso que ha sufrido este problema. Pasar tanto tiempo durmiendo en la intemperie y sobre la arena le ha dejado huella, convirtiendo el simple acto de descansar, en una cama, en un reto casi imposible. Reconoce que la dejado "reventada". Pero ahora Alma Cortés Bollo respira aliviada porque, lejos ya de la isla de Honduras, podrá pasar “más tiempo con su niña y con ciertas personas”, manifiesta la concursante.
La joven, hija de Raquel Bollo, está resurgiendo tras ser el foco de numerosos conflictos, tanto en la isla como al volver a casa. La fricción con Asraf Beno tuvo repercusiones en su círculo familiar y ha dado, como resultado, un alejamiento de su prima Isa Pantoja. De hecho, guarda silencio sobre las declaraciones que su hermano Manuel ha hecho. Este asegura que tomará medidas legales contra su prima Isa Pantoja. “No he visto nada, lo siento”, sentenciaba con cara seria antes de llegar a su casa de Sevilla. Por su expresión, se nota incómoda con este conflicto familiar que no cesa.La hija de Raquel Bollo ha perdido algunos kilos durante su paso por 'Supervivientes'. Después de tres meses de fatigas en la isla de 'Supervivientes 2023' ha adelgazado tan solo 5,8 kilos de peso. Ni ella misma se lo puede creer, eso sí. Está encantada de la vida y no ha dudado nunca en afirmar que está "buenorra".
Vídeo: Europa Press
Vídeo: Europa PressMás allá de las polémicas y conflictos, Alma está decidida a retomar su vida laboral y alejarse de los realities. Con solo 23 años, Alma es madre de Jimena, su hija con Juan José Peña. La niña fue bautizada casi dos años después de su nacimiento en la parroquia de Santa Ana en Sevilla. Ahora, Alma busca un equilibrio entre su vida profesional y su papel como madre, intentando dejar atrás la tormenta de controversias que han marcado su reciente paso por la televisión.