Alma Cortés Bollo se encuentra en la recta final de su segundo embarazo, que está siendo muy tormentoso para la hija de Raquel Bollo. Vivió un "primer trimestre tormentoso", tal y como ella misma confesó, además de hacer frente a diferentes sustos a lo largo de su embarazo. El último de ello, esta misma semana, cuando se encuentra en el octavo mes. La joven sufrió un percance con el coche que le llevó directamente para el hospital para hacerse las pruebas pertinentes y ver que todo estaba correcto.
Ha sido ella misma quien ha revelado este revés en plena recta final de su embarazo. "No me he pasado por aquí porque el día no terminó de la mejor forma. Tuve un percance con el coche, pero, gracias a Dios, está todo bien. Por esto estuve más desaparecida en la segunda parte de la tarde, y con todas las cosas que tenía que hacer... Pero bueno", comenzaba explicando.
Tal y como Alma Cortés Bollo confiesa, afortunadamente todo se ha quedado en un susto y tanto ella como el bebé que espera se encuentran bien. Sin embargo, para quedarse más tranquila, a pesar de que el percance no fue muy grande, decidió acudir al hospital para que le chequearan a ella y su bebé y descartar cualquier problema: "Fuimos al hospital, revisamos, y todo bien", ha dicho.
El segundo embarazo de Alma Cortés Bollo, repleto de sustos y complicaciones
Alma Cortés Bollo compartió con los lectores de SEMANA que estaba embarazada de su segundo bebé. Un niño al que llamará Miguel, como su padre. Será el compañero de juegos perfecto para su hija Jimena, fruto de su anterior relación con Juan José Peña, quien precisamente ahora mantiene una relación sentimental con Aguasantas, ex de Manuel Cortés, hermano de Alma. Un lío amoroso.
La joven se sinceró con SEMANA sobre cómo estaba viviendo este segundo embarazo, que tal y como ella misma aseguró, nada tenía que ver con el anterior. Tras compartir la noticia, habló con este medio sobre cómo habían sido los primeros meses. "Estos primeros meses han sido matadores. Apenas he tenido vida, me he pasado cuatro meses y medio vomitando, se me juntaron infecciones, virus… un poco de todo. La verdad es que no veía la luz. Miguel me está dando muchísimos más problemillas de los que me dio mi hija Jimena. Pero ya empiezo a disfrutar de lo que puede conllevar el embarazo, estar bien, que quiera salir y entrar…", dijo por aquel entonces sin llegarse a imaginar lo complicado que iba a ser este nuevo embarazo.
Y es que, Alma Cortés Bollo también ha tenido que hacer frente a un reposo absoluto. Fue en la semana 27 de embarazo cuando la joven empezó a sentir contracciones, lo que le obligó a acudir de manera urgente al hospital: "Una no es primeriza y sabe de lo que habla. La noticia se confirmó y eran contracciones, así que había que mantener un reposo absoluto junto a otros medicamentos para evitar el parto", explicó a principios del mes de junio, cuando sufrió este nuevo susto.
La joven tuvo que mantener reposo absoluto debido a riesgo de parto prematuro
Sin embargo, la cosa no quedó ahí, tras pasar un tiempo en la cama y recibir el alta médica en cuanto al reposo se refiere, se vio obligada a pasar de nuevo por el hospital. Alma Cortés Bollo sufrió una infección de orina y tuvo que acudir al servicio de emergencias con "fiebres superaltas". Afortunadamente, todo salió genial debido al buen hacer de la joven. "Pero yo que soy incansable, invencible y muy mala paciente, lo estoy haciendo todo correctamente y nos encontramos en la semana 28 más cinco días y la fiebre ha desaparecido, el malestar sigue desapareciendo con los días", dijo por aquel entonces.
Ahora, dos meses después de sufrir esos dos sustos durante su embarazo, se ha visto obligada a tener que acudir de nuevo al hospital tras sufrir un percance con el coche. La hija de Raquel Bollo tan solo espera que lo que resta de embarazo pueda disfrutarlo, mientras que organiza la llegada del nuevo miembro a la familia.
Así está viviendo este segundo embarazo la hija de Raquel Bollo
Como hemos dicho anteriormente, para Alma este embarazo nada tiene que ver con el anterior. Y no únicamente por las diferentes complicaciones, sino también por el momento vital en el que se encuentra. Así mismo lo confesó ella a SEMANA tras conocerse su estado de buena esperanza: "La maternidad a los 24 años se vive completamente diferente que a los 19. Yo tampoco soy la misma, ni las circunstancias que me rodean. Recuerdo que casi no tengo fotos embarazada de Jimena, me escondía todo el rato, apenas salía por todo el revuelo que se había generado a mi alrededor. Esta vez no es así, al contrario", nos confesó.