Mette-Marit no pasa por su mejor momento. No solo por la situación judicial de su hijo, la cual ha dañado la imagen de la Casa Real Noruega, sino también por su salud. Recordemos que la esposa de Haakon tiene fibrosis pulmonar crónica, enfermedad que le ha llevado a parar en seco su agenda. Un descanso obligado que podrá dedicar a su recuperación y a dedicarse tiempo a ella misma. Precisamente en ese retiro reparamos en otras cuestiones de la princesa, en concreto, en su joyero, donde encontramos una pieza con un turbio pasado.
El joyero de Mette-Marit, aparentemente discreto y cargado de simbolismo
Pero antes de adentrarnos en los pendientes que Mette-Marit ha lucido en actos oficiales, queremos hablarte de su colección. Aunque siempre ha apostado por la discreción, lo cierto es que la mayoría de los aderezos o accesorios que tiene están cargados de simbolismo, entre otros una herradura de la suerte o un corazón con la inicial H, nombre de su marido. También encontramos pulseras con diamantes, anillos de la eternidad o diademas, todas ellas de un valor incalculable, no obstante, ninguna de estas esconde algo tan llamativo como lo que te vamos a contar a continuación.
¿Quién regaló a Mette-Marit los pendientes de araña de diamantes?
Nos referimos a los pendientes de araña de la Princesa Mette-Marit, los cuales fueron un regalo de sus suegros. Lucidos tanto antes de su boda con el príncipe Haakon de Noruega como en multitud de enlaces reales como el de Federico de Dinamarca, podrían estar 'manchados' por una maldición. Pero, ¿qué anécdota pueden arrastrar unas joyas aparentemente inofensivas?
Debemos remontarnos al año 1954, fecha en la que el príncipe heredero Olav eligió estos pendientes de araña para su esposa, la princesa heredera Märtha. El motivo de este obsequio fueron sus bodas de plata, las cuales llevaron a que se programaran diferentes eventos de celebración. No obstante, ella cayó enferma y todo se canceló sin imaginar que acabaría falleciendo en el hospital. Tal fue la sorpresa que ella ni siquiera pudo estrenar estos pendientes, unos de los favoritos de Mette-Marit en la actualidad.
Otros miembros de la Casa Real Noruega también los han lucido en multitud de ocasiones
Märtha entró en coma y falleció con solo 53 años, dejando al príncipe heredero Olav completamente devastado. Años después fue cuando Sonia de Noruega heredó estos pendientes que ha utilizado entre las décadas de los 70 y 80 con muchísima asiduidad, al igual que ha hecho su hija Marta Luisa de Noruega, quien los llevó consigo para la boda de la Infanta Elena en el año 1995.
Fue seis años después, en el 2001, cuando Mette-Marit los recibió, siendo desde ese momento cuando la esposa de Haakon los ha lucido públicamente. También en privado, aunque en ese ámbito prefiere pasar más desapercibida. De hecho, recurre de manera habitual a amuletos, aquellas piezas con las que intenta atraer la buena fortuna. Esto nos lleva a hablar de otras royals como, por ejemplo, la Reina Sofía, otra de las que apuesta por pulseras o colgantes que demuestran que es muy supersticiosa.
Más allá de las joyas que Mette-Marit guarda en palacio, hay otros asuntos que preocupan a nivel internacional. Protagonista hace muy poco en la prensa internacional, la princesa ha acaparado todas las miradas por su voluntad de hierro. Ese sentido del deber que le ha llevado a dar todo de sí hasta que ya no podía más. "No muestra debilidad. Tiene mala salud, pero su fuerza está en su punto más alto y no se deja vencer. Es una auténtica luchadora. No solo demuestra ser admirable, sino también una voluntad de hierro por estar ahí para la Corona y su pueblo, sobre todo ahora", dijeron en Bunte, uno de los medios alemanas más reconocidos.
Tras varias semanas que han sido complicados tanto a nivel emocional como de salud, Mette-Marit ha dado explicaciones al respecto. Quiere acercarse al pueblo y sabe que la manera de hacerlo es rompiendo ella misma su silencio. Por ejemplo cuando hace unos días contó cómo se sentía. "Todo va bien. Estoy tomando unos días para relajarme un poco, así estaré lista para el trabajo y, sobre todo, para estar aquí en Trondheim. Ha sido muy divertido ver a las chicas en los relevos, son realmente increíbles", espetó.