La reina Margarita de Dinamarca acaba de celebrar su 50 aniversario en el trono. Y por tal motivo se han anunciado diversas celebraciones. Algunas tuvieron lugar el propio 14 de enero, fecha de proclamación, pero las más vistosas han debido posponerse a causa del repunte de la pandemia. Sin embargo, hay un evento que no se ha cancelado, y es una exposición con las maravillosas joyas de las que presume la monarquía danesa.
La soberana acaba de inaugurarla, acompañada por los príncipes herederos Federico y Mary, y su hermana la princesa Benedicta. Se titula "El joyero de una reina: 50 años en el trono contado a través de las joyas" y está abierta en el Museo de Amalienborg, en el palacio de Christian VIII, en Copenhague.
Un recorrido espectacular sobre la historia de los reyes y reinas de Dinamarca entre diamantes, esmeraldas, zafiros, perlas... La reina Margarita tiene a su disposición un conjunto incalculable de piezas. Muchas le han llegado por herencia a través de los siglos (aunque las puede usar, estas pertenecen al Estado) y otras las ha recibido de manos de su madre, la reina Ingrid.
La exposición cuenta con más de 200 piezas de la colección de joyería Majesty's, todas ellas referidas a uno o más eventos tanto privados como oficiales durante este medio 50 años de la Reina.
Su colección privada de joyas contiene joyas heredadas y recién adquiridas a lo largo de sus casi 82 años de vida y hacen alusión a los acontecimientos o personas más importantes.
De hecho, uno de sus tesoros más queridos es el juego de broche y pendientes de brillantes con forma de margarita, flor símbolo de su país, que recibió de su madre y que llevó prendido en su vestido de novia. En su Jubileo de Oro tampoco faltó muy cerca de su corazón.
Diamantes, zafiros, rubíes, esmeraldas, perlas... Todas las piedras preciosas imaginables se custodian en este joyero tan especial, considerado uno de los más fastuosos de las Coronas europeas.
Algunos de los juegos en su haber son bien conocidos y los ha utilizado desde que subió al trono, como el famoso conjunto de perlones que ya lució en su primer posado como reina y que ha llevado en numerosas ocasiones.
Todos ellos los luce en ocasiones de gran gala, acorde a su importancia, con ampulosos vestidos largos. Fiel a su espíritu creativo y original, Margarita suele combinar su uso, poniéndose una tiara como collar, o al revés, o un broche como colgante.
En definitiva, se da a conocer la imagen de una reina en toda su majestad, que ahora ha querido que los ciudadanos que lo deseen también puedan acercarse, aunque sea un poco, a su joyero.