Los Windsor tienen una semana de luto para llorar a Isabel II, mientras Carlos prepara su primer viaje

El rey Carlos III declara siete días para vivir el duelo en la intimidad tras once días de actos por las exequias de su difunta madre.

El pasado lunes 19 de septiembre se dio su último adiós a la reina Isabel II de Inglaterra en un impresionante funeral de Estado celebrado en la abadía de Westminster, en Londres. Allí se daba por finalizada la 'era isabelina' y se abría la del nuevo monarca, Carlos III. Así se inaugura una etapa en la que el primogénito de la difunta soberana impondrá su propio estilo. De momento, Carlos ha planteado una semana de luto para la familia Windsor.

Durante este periodo vivirán su duelo en privado, para lo cual han cancelado todos sus actos de la agenda oficial. Desde que Isabel II falleciera el pasado 8 de septiembre, en el castillo de Balmoral, todos ellos no han parado cumpliendo con un intenso programa de protocolo. Once días, nada menos, en los que han afrontado viajes, una proclamación, intervenciones en el Parlamento, varios cortejos fúnebres, vigilias y un funeral...

Finalmente despidieron a la matriarca en la Capilla de San Jorge de Windsor, donde, ya sin cámaras, el féretro descendió para su enterramiento en la Cripta Real, junto a sus padres y su amado esposo, el duque de Edimburgo. Descanse en paz.

Durante todos esos días, la familia ha tenido que guardar la compostura, aguantar las lágrimas en público (salvo por Meghan Markle). Ahora podrá vivir su duelo en la intimidad después de una exposición mediática al extremo.

El periodo de luto afecta tanto "a los miembros de la Familia Real como al personal de la Casa Real, a los representantes de la misma con deberes oficiales, así como a las tropas comprometidas con deberes ceremoniales", según reza la nota al respecto facilitada por el palacio de Buckingham.

No solo sus parientes podrán llorar a su querida reina, sino también los ciudadanos. Estos mismos que guardaron horas de interminable cola para presentar sus respetos ante el féretro de Isabel II instalado en Westminster Hall. En esta semana se mantendrán las banderas a media asta en todas las residencias reales. El luto oficial finalizará el próximo lunes 26 de septiembre.

Por otro lado, el rey Carlos III ya tiene en mente su próximo gran cometido oficial. Se trata de un Viaje de Estado, que tiene una especial relevancia pues se trata del primero de su reinado. Sería a Francia, tras la invitación cursada por el presidente galo, Emmanuel Macron, según informa el diario Daily Telegraph. Y además estaría prevista para muy pronto, tanto como el mes próximo. Además, el mismo medio añade que el monarca podría visitar Alemania justo después.

Será la primera Visita de Estado del Jefe del Estado británico en siete años, ya que la avanzada edad de la reina Isabel II y sus problemas de movilidad le impidieron viajar al extranjero en su última etapa.

El rey Carlos también deberá abordar otros viajes 'obligados' a los países de la Commonwealth (los que formaban parte del antiguo Imperio Británico), que le tienen como su Jefe de Estado, tales como Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Algunas de estas naciones, como Antigua y Barbuda, ya han manifestado su intención de hacer un referéndum para decidir si siguen o se desvinculan de la Corona británica. Así pues, el reinado de Carlos, de 73 años, se plantea con muchos desafíos.