El 31 de mayo de 1923 nació Rainiero de Mónaco, quien se convertirá en el soberano del Principado durante más de 50 años, hasta su muerte, el 6 de abril de 2005. Por eso, con motivo del que hubiera sido su centenario, se han organizado diversos actos y homenajes al anterior monarca. El príncipe Alberto capitanea todas estas iniciativas y una de ellas ha sido de lo más espectacular: ha liderado un paseo en coches antiguos, que precisamente su padre coleccionaba con pasión, por las calles de Montecarlo. Y lo ha hecho acompañado de toda la familia Grimaldi, desde su esposa, la princesa Charlene y sus dos hijos, los mellizos Jacques y Gabriella; hasta sus hermanas, las princesas Carolina y Estefanía; sus sobrinos y sobrinos nietos; además de su querida prima Mélanie-Antoinette de Massy.

Los Grimaldi se dan un espectacular paseo en coches vintage por el centenario de Rainiero
Gtres.

La jornada era perfecta, soleada, primaveral y con el mar de la Costa Azul en plenitud. El príncipe Alberto comenzaba saliendo del Palacio al volante de un descapotable, con su esposa como copiloto, y sus hijos detrás. Encabezaba la comitiva de unos vehículos impresionantes de todas las épocas, desde los años 20 y 30 y de las marcas más míticas del motor.

La princesa Carolina, con un precioso vestido largo rojo, era la viva imagen del glamour conduciendo otro de los coches que pertenecieron a su querido padre, y que ahora se custodian en un museo habilitado al efecto para que todo el pueblo pueda visitarlo. De los suyos estaban sus hijos Andrea Casiraghi, con su mujer, Tatiana Santo Domingo, y sus tres pequeños, y Pierre Casiraghi y la esposa de este, Beatrice Borromeo, también con sus dos hijos. Además de su hija menor, Alexandra de Hannover, inseparable de su novio, Ben Sylvester Strautmann. Gafas de sol, sombreros panamá... Los looks de los 'royals' eran puramente retro.

Los Grimaldi se dan un espectacular paseo en coches vintage por el centenario de Rainiero
Gtres.

Otro de los vehículos lo ocupaba la princesa Estefanía, si bien ella no conducía. El suyo era un modelo cubierto construido con madera, típico de la década de los cuarenta, que compartía con sus hijos: Louis Ducruet, con su esposa, Marie Chevallier, quienes el pasado 4 de abril fueron padres de una niña a la que han llamado Victoire; Pauline Ducruet y Camille Gottlieb.

El desfile real era todo un espectáculo que han seguido muchos personas por el trayecto a lo largo de la "Roca". Y sin duda, un precioso homenaje a Rainiero de Mónaco, que consiguió poner en el mapa mundial a este pequeño estado mediterráneo tras su boda con Grace Kelly. Tanto tiempo después, todavía siguen conservando toda su magia.