Hace cuatro años que el príncipe Harry y Meghan Markle fijaron su residencia en Estados Unidos tras el sonado Megxit. La decisión del matrimonio de apartarse de la primera línea de la corona británica no estuvo exenta de polémica, generando una gran repercusión en Reino Unido. La vuelta a la presidencia de Donald Trump podría afectar a la tramquila vida de los duques de Sussex que residen en una mansión de Montecito, California. Te contamos el motivo.
Donald Trump ha sido muy crítico con el príncipe Harry en los últimos años. No dudó en su momento en asegurar que había traicionado a la reina Isabel II. Incluso sugirió que si se convertía en presidente deportaría al príncipe Harry. "No lo protegería. Traicionó a la reina. Eso es imperdonable. Estaría solo si fuera por mí", afirmó durante un acto a principios de este año, cuando aún era un posible candidato a la presidencia.
La visa estadounidense del príncipe Harry, en el punto de mira
El tema de la visa del príncipe Harry ha generado cierto debate entre expertos en el país. Donald Trump aseguró que tomaría las "medidas apropiadas". Además, subrayó durante que la administración de Joe Biden había actuado con demasiada "amabilidad" con el hijo pequeño del Rey Carlos III respecto a su mudanza a California.
Uno de los puntos clave para entender la raíz del conflicto son las revelaciones que realiza el príncipe Harry en sus memorias 'Spare', publicadas en medio de una gran expectación el año pasado. En las mismas asegura que consumió drogas durante su juventud, entre ellas, cocaína y marihuana. Este tema hizo que un grupo de expertos conservadores de Washington cuestionara su admisión en Estados Unidos.
La Heritage Foundation presentó una demanda contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) para conocer si en los registros había revelado el consumo de drogas. La entidad manifestó que el tema era de "inmenso interés público". Finalmente, el juez Carl John Nichols aseguró que "el público no tiene un fuerte interés en la divulgación de los antecedentes de inmigración del duque de Sussex".
"Como cualquier ciudadano extranjero, el duque tiene un interés legítimo en la privacidad de su estatus migratorio. Y las declaraciones públicas del duque sobre sus viajes y uso de drogas no revelaron, y por lo tanto no eliminaron, su interés en mantener información privada y específica sobre su estatus migratorio, solicitudes u otros materiales", señaló el juez.
Donald Trump siempre ha manifestado su animadversión por el príncipe Harry. Incluso afirmó que no le daría ningún trato preferencial si era reelegido presidente. Asimimo subrayó en su momento que el matrimonio debía pagar su equipo de seguridad. El cruce de reproches también viene por parte de Harry quien ha afirmado que el político conservador estadounidense tiene las manos manchadas de "sangre" debido a sus políticas climáticas.
El hijo de Donald Trump, Eric, afirmó que consideraba al matrimonio "dos manzanas podridas". Unas declaraciones que realizó en la cadena inglesa GBNews. "No soy fan de Meghan, no ha hecho las cosas bien desde el principio". Incluso no dudó en afirmar que si hay que devolverlos a Reino Unido "habrá qué hacerlo. Te puedes quedar con esos dos, es posible que ya no los queramos más. Parece que están en su propia isla", señaló.
La vida de Harry y Meghan en Estados Unidos
Los duques de Sussex, que protagonizaron una gran boda en el Castillo de Windsor el 19 de mayo de 2018, anunciaron su decisión histórica de retirarse de sus deberes reales el 8 de enero de 2020. Daban un "paso atrás" en sus obligaciones y subrayaban que a partir de entonces serían "independientes económicamente".
El sonado Megxit supuso un antes y un después dentro de la corona británica, también fue un mazazo para Isabel II quien finalmente respetó la decisión unilateral de su nieto. El matrimonio primero se mudó a la residencia del productor Tyler Perry en Los Ángeles. Más tarde adquirieron su actual mansión en Montecito, Santa Bárbara, donde viven junto a sus dos hijos Archie y Lilibet. Esta residencia está blindada a los curiosos y cuenta con un extenso jardín y huerto.
La vida de Harry y Mehan al otro lado del charco sigue generando un gran interés. El pasado mes de marzo, la exactriz anunció que había creado una marca enfocada en estilo de vida, American Riviera Orchard, que aún está en proceso. Parece que la empresa será similar a Goop, la marca que lidera la actriz Gwyneth Paltrow. Se sabe que planea vender accesorios de yoga y artículos para el hogar, entre otros elementos.
Sin embargo, el pasado mes de septiembre se rechazó la solicitud de registro de la marca. "Se deniega el registro porque la marca solicitada es principalmente descriptiva geográficamente", indicaba la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos. Añadía que los solicitantes deben "dejar libres los nombres geográficos para todas las empresas que operan en la misma área".