El mismo día en el que el príncipe Guillermo (41 años) volvía a sus compromisos oficiales, Harry de Inglaterra (39 años) regresaba a casa. Le esperaba Meghan Markle (42 años) en Los Ángeles, un viaje exprés que solo duró 24 horas y que suscitó grandes preguntas. Una de ellas la razón por la que los hermanos no sacaron hueco para verse en un momento crucial para la familia y es que solo días antes su padre, Carlos III, había sido diagnosticado de cáncer. Ha sido ahora cuando fuentes cercanas a ambos han aportado más luz sobre una relación aparentemente rota.
Harry "habría aceptado encantado" reunirse con el príncipe Guillermo
A pesar de que Harry "hubiera aceptado encantado" una reunión con su hermano Guillermo, el marido de Kate se negó a reencontrarse con él. Así lo cuentan en el medio británico 'The Sun', donde hacen hincapié en lo complicado que es para el hijo mayor de Carlos III hacer borrón y cuenta nueva. "No puede fingir y hacer como si no pasara nada. Guillermo no puede confiar en Harry, dadas sus repetidas traiciones públicas", aseguran tras ponerse en contacto con su círculo más cercano.
Aunque ambos desean apoyar a su padre, quieren hacerlo por separado. Sobre todo porque el príncipe de Gales cree que pedir perdón no vale de nada. Recordemos su incendiaria autobiografía, 'Spare', donde Harry calificó a Guillermo como su "archienemigo" y donde se contó la pelea que en su día protagonizaron. Una bronca en la que, según él, fue agredido por su hermano mayor, desmontando su imagen idílica en Inglaterra.
Harry tampoco ha visitado a Kate Middleton, a pesar de la buena relación que tuvieron en su día
Ha sido un amigo de Harry el que ha aportado más datos acerca de sus intenciones al viajar a Londres. "La razón principal del duque para viajar al Reino Unido es visitar a su padre. Si hubiera tenido la oportunidad de ver a Guillermo, el Duque la habría aceptado con gusto", explican en el anteriormente medio citado. Cabe señalar que Harry no solo no ha visto a Guillermo, tampoco se ha acercado a ver a la convaleciente Kate, quien fue intervenida de una operación abdominal por la que todavía se encuentra de baja. Aunque ambos se llevaban de maravilla en el pasado, lo cierto es que la relación se ha tensado, al igual que sucedió con el resto de la familia.
En este medio le contábamos estos días detalles curiosos de la semana más intensa de la Familia Real Británica. Desde el helicóptero maldito en el que Carlos III viajó para reunirse con su hijo Harry a la suite donde durmió el marido de Meghan Markle antes de regresar a casa. Por otro lado, detallábamos cómo es el tratamiento pionero de Carlos III, el cual realiza una vez a la semana en régimen ambulatorio. Habrá que esperar para conocer cuál es su estado una vez avance el proceso, el cual le mantendrá alejado de sus funciones oficiales debido a que quieren evitar cualquier exposición a virus que compliquen su enfermedad.