El Príncipe Harry no está dejando títere con cabeza en su explosivo libro de memorias. El hijo de Carlos III se ha abierto en canal y está contando su versión sobre algunos de los momentos más importantes para la Familia Real. Entre ellos, ha sacado a la luz la gran mentira de la boda de Guillermo y Kate Middleton. En su relato, el marido de Meghan Markle ha desvelado un hecho insólito del idílico enlace: acudió con "el pene congelado".
En marco de 2011, el Príncipe Harry hizo una expedición al Polo Norte. Se trató de un viaje en el que recaudó dos millones de libras y estuvo junto a cuatro exmilitares que resultaron gravemente heridos en la guerra de Afganistán. De aquella aventura, el hijo de Carlos III regresó a Reino Unido con graves secuelas que arrastró hasta un mes después, fecha en la que tuvo lugar la boda de su hermano. "Se me congeló el pene. Entonces, no quise hablar demasiado de mi pene. Al volver a casa me di cuenta de que estaba congelado", relata. Durante la boda, insiste en que su cabeza estaba centrada en otra cosa: "Estaba junto a mi hermano en la Abadía de Westminster y no lo sentía".
De la misma forma, Harry también cuenta que su padre, el ahora Rey de Inglaterra, se mostró muy interesado por su estado tras volver de la expedición. "Simpatizaba con la incomodidad de mis orejas y mejillas cortadas por la escarcha. Mientras las orejas y las mejillas se estaban curando, el pene no. Se había convertido en un problema cada día más grande", recuerda. Después del gran día de Guillermo y Kate, el hijo pequeño de Diana de Gales acudió al médico y puso fin a sus problemas con una crema.
Carlos III bromeó con la paternidad de Harry
«¿Quién sabe si soy tu verdadero padre? Tal vez tu padre esté realmente en Broadmoor, mi querido hijo». Así describe Harry la broma «de mal gusto» de su progenitor, en la que hace referencia a los rumores que durante años sonaron sobre la posibilidad de que su verdadero padre era James Hewitt, el jinete con el que Diana de Gales tuvo relaciones extramatrimoniales. En sus memorias, Harry también habla de cómo perdió la virginidad y cómo se tomó que su padre se casara con Camilla Parker-Bowles. «Rogó» a su padre que no se casara con Camilla porque temía que algún día fuera su «malvada madrastra».
El duque de Sussex alega que él y su hermano no se interpondrían en la relación del entonces príncipe de Gales, pero le habían pedido que no pasara por el altar por segunda vez. Ambos llamaban a Camilla «la otra mujer». Harry afirma que conocerla por primera vez fue como una «inyección», y escribe: «Cierra los ojos y ni siquiera lo notarás».