Mary de Dinamarca (52) ha regresado a escena. Pero con un gesto y una actitud bastante llamativos, que da que pensar sobre lo que ha ocurrido durante sus recientes vacaciones de Semana Santa. Su reaparición oficial era de lo más esperada y cada movimiento suyo se ha analizado en profundidad, máxime cuando tanto a ella como al rey Federico se les ha criticado bastante por volver a disfrutar de días libres cuando han transcurrido poco más de dos meses de su ascenso al trono como soberanos.
La reina Mary ha asistido a un acto castrense para celebrar el 75 aniversario de la Guardia Nacional. Durante el desfile, que tuvo lugar frente al Museo de la Libertad de Copenhague, la consorte fue el centro de atención en varias ocasiones. Aunque es evidente que se trataba de un evento en el que primaba el respeto y la seriedad a las tradiciones militares, lo cierto es que la marcialidad de Mary en ocasiones también resultó excesiva.
La excesiva seriedad de Mary de Dinamarca tras las vacaciones
A las fugaces sonrisas seguía la seriedad en su rostro. Un detalle que no ha pasado inadvertido y que vuelve a soltar a los fantasmas que sobrevuelan sobre ella desde hace un tiempo. El 'affaire' de su esposo con Genoveva Casanova ha causado muchos daños colaterales. El paseo del entonces todavía príncipe heredero danés por Madrid con la mexicana afincada en España ha dado la vuelta al mundo. Y sigue coleando desde que salió a la luz, a finales del pasado octubre, sin que nada se haya aclarado.
El hecho de que las fotos se publicaran a principios de noviembre, coincidiendo con la visita de Estado de los Reyes Felipe y Letizia en Dinamarca, no hizo sino acrecentar la leyenda. Los gestos de Mary eran todo un poema, y no menos los de su marido. Una tensión que todo analista de comunicación no verbal observó como reveladora.
Por no hablar de nuestros soberanos, y en particular de una Reina Letizia que parecía 'consolar' sin palabras y haciendo gala de empatía hacia su anfitriona. Nuestra reina era consciente de que, más allá del verdadero trasfondo de esas fotos, Mary estaba atravesando un momento muy complicado.
La Casa Real danesa no ha entrado a dar explicaciones en ningún momento tras el escándalo sobrevenido por esta relación por considerarlo un "asunto privado". Ante el silencio de Federico, la desaparición absoluta de Genoveva Casanova. La exmujer de Cayetano Martínez de Irujo se ha quitado de en medio y solo la hemos visto en un par de ocasiones, y además de incógnito.
Federico y Mary de Dinamarca, los reyes que sellaron la paz con un beso
Pero si nos remitimos a los hechos estrictos, la consecuencia es que el mismo 31 de diciembre, último día del año 2023 y para sorpresa de todos, la reina Margarita anunciaba su abdicación después de 52 años como soberana y Jefa de Estado.
Su primogénito, Federico, fue proclamado como nuevo rey el pasado 14 de enero. Y a su lado no faltó Mary como flamante reina consorte. El beso que ambos se dieron en el balcón del Palacio Real de Copenhague ante la multitud que les esperaba y aclamaba sirvió para sellar la anhelada paz. Al menos de cara a la galería.
Después de ese gran día de brillo y esplendor, los gestos de complicidad y cariño entre los nuevos reyes de Dinamarca han sido más bien escasos. Y además ha destacado los pocos compromisos oficiales que ambos han llevado a cabo juntos.
Las criticadas vacaciones de la Familia Real danesa en la nieve
En otro sentido, también ha sido muy comentadas las vacaciones de los monarcas. Y es que en tan breve espacio de tiempo, Federico y Mary han aprovechado para marcharse hasta en dos ocasiones. Y además generosamente,, con casi dos semanas fuera.
Ya en febrero los reyes se marcharon con sus cuatro hijos a Suiza, donde poseen un chalet en la estación de esquí de Verbier. Y ahora, a finales de marzo, han vuelto a repetir la jugada, de nuevo con el escenario de la nieve para sus planes de ocio.
Muchas vacaciones para un soberano principiante, ¿no? Esta es la crítica generalizada que escriben los medios de su país. Y sobre todo en contraste con su madre, la reina Margarita, quien ha estado (y continúa) al pie del cañón hasta los 83 años.
Todo esto, sin embargo, no ha logrado que los reyes Federico y Mary disipen del todo la sombra de la duda sobre su matrimonio. Y sobre su 'reconciliación'. La sospecha de una crisis encubierta no cesa, pero su recién estrenado estatus y la responsabilidad institucional parece que han primado sobre cualquier sentimiento 'humano'. El deber es el deber.
La reina Mary, en pro de la libertad
En esta reaparición oficial de la reina Mary todo esto vuelve a otra vez a la superficie. La esposa del monarca cumplió con creces, siempre profesional e impecable, ejerciendo como uno de los valores más sólidos de la monarquía danesa.
Durante este acto, Mary de Dinamarca dio un discurso sin tacha. Posteriormente, la soberana visitó el Museo de la Libertad, escuchando historias sobre algunos de los daneses que resistieron y se opusieron a la ocupación alemana durante la Segunda Guerra Mundial. Sigue avanzando en la agenda en solitario, sin el rey Federico. Cada uno por su lado.