Ana Obregón está atravesando los momentos más difíciles de su vida tras perder, el pasado 13 de mayo, a su adorado hijo, Álex Lequio. Desde entonces han transcurrido días de intenso dolor y abatimiento, de los que está saliendo poco a poco gracias a su propia fuerza y a la inestimable ayuda de los que más la quieren, que son muchos. Entre ellos se encuentran nada menos que los Reyes eméritos Juan Carlos y Sofía y los Reyes Felipe y Letizia. Precisamente el monarca emérito fue el primero en llamar a la artista después del terrible desenlace.
Así lo cuenta la propia Ana Obregón, quien ha roto su silencio en la revista Hola para compartir sus sentimientos cuando se han cumplido seis meses de la ausencia de su único hijo. La actriz y presentadora revela que Don Juan Carlos llamó por teléfono cuando ella y Alessandro Lequio, padre de su hijo, estaban en el hospital. En concreto le llamó a este, del que además es familia (su madre, Alessandra Torlonia, era hija de la Infanta Beatriz de Borbón, hija del Rey Alfonso XIII). Según Ana, el Rey habló primero con su expareja y luego pidió que le pasara a Ana. Acto seguido fue la Reina Sofía quien les expresó sus condolencias. "Esa llamada me emocionó y estoy muy agradecida", dice Ana.
Durante la fase final de la dura enfermedad del joven, sus padres se trasladaron a Barcelona para estar junto a él. Ana Obregón relata que cuando regresó a la casa que tenían alquilada se encontró muchísimos mensajes de cariño. Entre las cientos de cartas y telegramas había uno firmado por los Reyes Felipe y Letizia, quienes también quisieron prestarle su apoyo moral en los tiempos más complicados.Como reconoce la artista, Alessandro es fundamental en el duro proceso de duelo que está atravesando, pues solo él conoce de verdad lo que está sintiendo. Su amor como padres ha sido ejemplar en todos los sentidos, acompañando a su hijo hasta el final... y más allá.
Esta entrevista llega al poco de confirmarse que será ella, junto a Anne Igartiburu, la presentadora de la retransmisión de las Campanadas de Nochevieja para Televisión Española. Una experiencia que abordará por cuarta vez (la última fue en 2004 junto a su compañero Ramón García), pero que será, sin duda, la más especial de todas ellas.
Aunque le ha costado mucho aceptarlo, finalmente Ana Obregón sacará fuerzas de flaqueza para ponerse guapa y ofrecer su espléndida sonrisa a todos los españoles. Asegura que lo hará con su hijo Álex en mente, y que tratará de llevar su amor y compasión a todas aquellas personas que puedan haber pasado por lo mismo que ella o que hayan perdido a sus seres queridos durante la pandemia. También espera continuar su legado creando su propia fundación para ayudar en la lucha contra el cáncer que le arrebató lo que más quería. Muchas razones para continuar viviendo.