El príncipe Harry y Meghan Markle han reaparecido juntos en Nueva York para recibir un importante premio por su lucha contra el racismo. La noche lluviosa no impidió que la duquesa de Sussex resplandeciera con uno de sus mejores looks en mucho tiempo: radiante de blanco, luciendo hombros y con un significativo detalle que no ha pasado inadvertido. En su mano brillaba el impresionante anillo de diamantes y aguamarina que perteneció a su suegra, Diana de Gales, y que le regaló su esposo con ocasión de su boda, el 19 de mayo de 2018.
En un estilismo concebido enteramente en blanco y negro, este detalle era si cabe más llamativo. El vestido era de Louis Vuitton, firma por la que la duquesa apostaba en público por primera vez. Su escote Bardot, con los hombros al descubierto, nos recordaba inmediatamente al look de Kate Middleton en la entrega del Premio Earthshot, pocos días antes en Boston. Pero mientras que el de la princesa de Gales era alquilado, el de Meghan Markle era un estreno absoluto, y no precisamente barato.
El blanco es el símbolo de la paz por excelencia, pero las últimas noticias que protagoniza la pareja no tienden una ramita de olivo precisamente. Nos referimos a las imágenes que ya hemos visto como anticipo de su esperadísimo documental para Netflix, titulado en España "Enrique y Meghan", que se estrena mañana 8 de diciembre. En ellas el príncipe denuncia las supuestas tácticas de la Casa Real británica: "Hay filtraciones, pero también datos falsos. Hay una jerarquía familiar. Juegan sucio".
El brillante anillo azulado destacaba en la mano de Meghan Markle con orgullo y significancia. Parece que los duques de Sussex no están dispuestos a callar durante más tiempo. Después de respetar el luto tras la muerte de la reina Isabel II, dos meses y medio después de su funeral la pareja lanza su documental y este no ahorra en 'bombas informativas' según hemos comprobado en sus avances. Un contenido que pronto se desvelará y que promete volver a levantar ampollas con la Familia Real británica.
Y en particular con el príncipe Guillermo y Kate Middleton, con los que no se han visto durante su reciente visita a Estados Unidos. Se dice que el lanzamiento de los trailers de su documental coincidiendo con su estancia en dicho país han sido muy conscientes y destinados a robarles el protagonismo. En lugar de centrarse en la causa de la defensa del medioambiente, una causa muy importante creada por los 'royals' británicos, se habló del 'no encuentro' entre ellos.