Carlos III mantiene en vilo a la sociedad británica. Su salud ha sido el motivo principal por el que ha modificado su agenda y es que él de motu proprio decidió cambiar su tratamiento de quimioterapia por otro sin base científica. Poco después fue ingresado, ya que ni el cáncer estaba remitiendo ni lo que él creía estaba funcionando. Pero, ¿qué novedades existen al respecto?, ¿se ha hecho algún comunicado oficial al respecto?
Mientras las fuentes oficiales están en silencio, hay expertos en realeza que sí han roto su silencio. Por ejemplo en Reino Unido, donde les resulta llamativo que el Rey solo se haya tomado este descanso desde que anunció la enfermedad a la que se enfrentaba. "Es realmente extraordinario que solo haya tenido un descanso en todo este tiempo", dice Rusell Myers en The Mirror. Un parón sobre el que pesan muchas incógnitas, siendo el entorno de Donald Trump el que ahora ha arrojado luz sobre una historia repleta de sombras.
Así lo cuentan en prensa internacional, donde insisten en que el presidente de Estados Unidos ha deseado una pronta recuperación al monarca, no siendo este el único dato que ha salido a la luz. Además, se ha descubierto cuál es su paradero y es que tras salir del hospital se ha alojado en su finca de Highgrove en Gloucestershire, valorada en más de 47 millones de euros y que es de su propiedad. Es su residencia rural, fue adquirida en la década de los 80 y destaca por su impresionante exterior, donde posee impresionantes jardines en los que desconectar y respirar aire fresco.
Aunque él continúa trabajando desde la sombra, lo que sí le ha pedido su equipo de trabajo es que reduzca su ritmo en palacio. No solo por su situación actual, sino también futura. Cabe señalar que tiene 76 años y que, a pesar de las recomendaciones médicas, él mismo fue quien decidió apostar por una terapia "rompedora". Lo han contado durante este fin de semana en 'Fiesta', donde han explicado con todo lujo de detalles en lo que consiste su tratamiento.
"Él le ha dicho a los médicos que quiere parar porque tiene que dejarlo para hacer este tratamiento alternativo, quiere hacerlo (...) Durante tres semanas cada día un enema de café, luego 13 zumos al día, el máximo de litros que pueda. Es una limpieza absoluta. Luego una inyección de extracto de bacalao y B12. El tratamiento le cuesta 4.900 euros por semana y 20.000 euros las inyecciones que van a parte", han comentado en Telecinco.
Y, aunque es cierto que sobre su salud ha preferido no pronunciarse, sí que ha querido mostrarse presente tras lo sucedido en Tailandia. Sobre todo para dar el pésame y revelar lo entristecido que está al conocer las víctimas y los daños que ha dejado el terremoto del sudeste asiático.
"Mi esposa y yo nos sentimos profundamente conmocionados y entristecidos al enterarnos del devastador terremoto en Myanmar (nombre oficial), con una trágica pérdida de vidas y terribles daños a viviendas, edificios y medios de subsistencia, así como la destrucción de pagodas sagradas, monasterios y otros lugares de culto. En estos momentos tan difíciles y desgarradores, mi esposa y yo enviamos nuestro más sentido pésame a todos aquellos que han sufrido la profunda tragedia de perder a sus seres queridos, sus hogares y sus preciados medios de vida", ha dicho.
Fue hace solo unos días cuando fuentes de palacio emitieron un comunicado en el que se anunciaba las medidas de última hora que se debían tomar. "Tras el tratamiento médico programado y en curso para el cáncer esta mañana, el rey experimentó efectos secundarios temporales que requirieron un breve período de observación en el hospital. Como medida de precaución y por consejo médico, el programa de mañana también se reprogramará. Su majestad desea presentar sus disculpas a todos aquellos que puedan sentirse molestos o decepcionados por ello”, detallaron. Días después Carlos III sigue centrado en su recuperación, la cual todo el mundo desea.