El paso del tiempo, los cuidados inadecuados o las alteraciones hormonales, son algunas de las causas que provocan la pérdida de densidad y volumen en el cabello. No vamos a mentirte, conseguir el pelo que deseas no es fácil, pero si cambias ciertos hábitos en tu día a día y sigues unos sencillos trucos, puedes lograrlo. ¡Apunta!

Declárale la guerra a la humedad

Un cabello mojado es un cabello mate y de aspecto pobre, por eso nunca te vayas a la cama con el pelo húmedo. Lo ideal es que no utilices el secador a máxima potencia ni realices movimientos de pelo en todas las direcciones, para que no se alboroten las puntas. Mientras retiras la humedad, utiliza un cepillo redondo que permita circular el aire por su interior, para que se evapore la mayor cantidad de agua sin recalentar las cutículas. Esta es la mejor forma de lograr un cabello brillante y lleno de volumen.

Aplícate la mascarilla con el pelo seco

Aunque normalmente usamos las mascarillas con el pelo mojado, lo cierto es que también está bien hacerlo sobre el cabello seco. Elige una redensificante y, para beneficiarte al 100% de todos sus ingredientes, una vez aplicada envuélvete el pelo con papel de plástico y una toalla caliente durante 20 minutos. Después, retírala, pon la cabeza bajo la ducha y emulsiona con los dedos hasta que la mascarilla desaparezca. Finalmente utiliza un champú voluminizador.

cabello con más volumen
Dejar atrás un cabello pobre es posible si eres constante y cambias ciertos hábitos en tu día a día (@Alicecampello)

No te olvides de cepillar tu melena

Lo ideal es hacerlo dos veces al día, por la mañana y por la noche. Pero si tu pelo se enreda con facilidad, hazlo las veces que sean necesarias. Eso sí, si tienes el cabello rizado no abuses, ya que se romperá el rizo y se encrespará. Además, si vas a lavarlo debes cepillarlo justo antes de utilizar el champú, ya que peinar el cabello es una manera eficaz de repartir el sebo de las raíces hasta las puntas, y esta es la protección natural más adecuada para cuidar las cutículas.

Exfolia obligatoriamente

De la misma manera que exfolias tu rostro y cuerpo, también debes hacerlo con el cuero cabelludo. Exfoliarlo una vez por semana contribuye a retirar las células muertas, el exceso de sebo, y los residuos de productos que pueden asfixiar el folículo piloso (y como consecuencia restar densidad). Aplica el exfoliante capilar, masajea, acláralo con mucha agua, lávate el cabello y, finalmente, utiliza el acondicionador de medios a puntas.

Y por último... Incluye estos alimentos en tu dieta

Si quieres un cabello fuerte, sano, nutrido y lleno de vida, debes seguir rituales cosméticos, pero también comer bien. ¿Los alimentos que no pueden faltar en tu dieta? Las zanahorias, que ayudan a la producción de aceites que sostienen el cuero cabelludo y evitan la sequedad y la caspa. También debes incluir en tus menús huevos, ya que son fuente de vitamina B12, proteínas y minerales, que contribuyen al transporte de oxígeno a los folículos pilosos, logrando así que la vida del cabello sea más larga. Por último, alíate con las legumbres. Las lentejas, los garbanzos o las habas contienen zinc, hierro y proteínas, esenciales para mantener un cabello fuerte. Además, también son ricas en biotina, una sustancia que ayuda a fortalecer los folículos pilosos y, por tanto, a reparar el cabello.

¿Has tomado nota de todo? Entonces sigue bajando y ficha todos los productos que necesitas para lucir una melena más abundante y con volumen.