El harmol, un compuesto presente en alimentos como el café, mejora parámetros metabólicos que se asocian con una mayor calidad de vida. Te contamos todo lo que dice la ciencia sobre el posible aumento de la longevidad relacionado con el consumo de café.
Consumir café no solo es un gesto cotidiano que hace que despejemos nuestra mente después de permanecer horas en el reino de Morfeo, también es un alimento sanísimo para incluir en tu rutina de hábitos saludables. Al menos así lo demuestran infinidad de estudios sobre el café. El último de ellos ha concluido que el harmol presente en el café es responsable directo del aumento de la esperanza de vida. Te contamos todo acerca de este descubrimiento.
El harmol del café a examen
El instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA de Valencia ha participado en un estudio publicado en la revista Nature Communications y que ha capitaneado el Instituto IMDEA Alimentación. En él se ha concluido que el harmol, un compuesto de la familia de las betacarbolinas presente en el café y popular por sus efectos neurológicos, mejora la función músculo-esquelética y los parámetros metabólicos que se asocian con una mejora en la calidad de vida a los largo de los años.
En sus experimentos, el tratamiento con harmol alargó significativamente la esperanza de vida en dos modelos de invertebrados, pero no solo eso, también mejoró la resistencia a la insulina, la tolerancia a la glucosa y la acumulación de lípidos hepáticos en prediabetes, además de reducir la fragilidad en sujetos de avanzada edad.
El harmol, objeto de este estudio, está presente en alimentos como el café pero también en alimentos como los cereales, la carne o el pescado y, en las dosis utilizadas por los científicos no mostró ninguna toxicidad y pocos efectos sobre el sistema nervioso central. ¿Significa esto que tomar café puede contribuir a aumentar la esperanza de vida? Según los expertos y los últimos estudios, sí.
El envejecimiento y la fragilidad asociada
Este tipo de estudios abren una ventana hacia el avance en la mejora de la calidad de vida durante el envejecimiento, descubriendo formas eficaces para evitar la fragilidad asociada con la edad y aumentando la longevidad. La alimentación es una de las estrategias con las que contamos para vivir mejor y durante más tiempo, además de llevar hábitos de vida saludables, hacer ejercicio físico y tener una adecuada higiene del sueño.
¿Qué ocasiona la pérdida de masa muscular o sarcopenia? El deterioro físico relacionado con el paso de los años, la fragilidad y el envejecimiento muscular se asocia con una alteración celular en las mitocondrias. Esta disfunción mitocondrial provoca un deterioro muscular, con pérdida de masa y de potencia. La fragilidad afecta a más del 33 % de la población mayor de 80 años y lo que supone es una capacidad más reducida para responder ante pequeños elementos estresores del día a día por lo que la autonomía se ve comprometida. Si las células pierden la capacidad de producir energía el cuerpo se fatigará con mayor facilidad y existe un mayor riesgo de enfermedad.
¿Qué es lo que pasa con el harmol? Pues que tiene la increíble capacidad de activar las células para evitar ese deterioro de las mitocondrias aumentando de un plumazo la calidad de vida y la longevidad del individuo. ¿A que te apetece un café ahora?
¿El café nos hace también más fuertes y felices?
En la investigación no solo descubrieron el poder de activación celular del harmol, también se demostró su eficacia al fortalecer el cuerpo y también en aumentar el bienestar global del individuo.
Según investigadores de IMDEA Alimentación, “lo que hace el harmol es un mecanismo muy parecido al que activarían la restricción calórica o el ejercicio. Hace trabajar a las mitocondrias de una manera controlada, y eso las hace más fuertes”, señala el investigador Luis Filipe Costa-Machado, primer autor del artículo. El Dr. Pablo J. Fernández-Marcos, principal responsable del proyecto, enfatiza otro aspecto muy interesante dentro del estudio: “Con el harmol hemos descubierto que este efecto de mejora mitocondrial lo llevan a cabo las células mediante mecanismos parecidos a los que nos hacen sentir más felices, ya que comparten las mismas proteínas diana. Esto abre un campo de investigación muy interesante sobre la asociación entre el estado psicológico y el envejecimiento”.
Objetivo: un envejecimiento más saludable
Lo más relevante de esta investigación, además de que a partir de ahora tomaremos mucho más felices el café de la mañana, es su contribución hacia el objetivo científico de un envejecimiento más saludable.
La Dra. Gómez Cabrera, de INCLIVA, cuenta a este respecto que “la mejora de la calidad de vida en el envejecimiento de la población es, sin lugar a dudas, un gran éxito. Hemos conseguido aumentar la expectativa de vida más en los últimos 100 años que en los 2.000 años previos, especialmente en nuestro país, que se sitúa junto a Japón y Suiza como el tercer país con una mayor longevidad” y advierte que “sin embargo, el envejecimiento de la población es también un gran reto porque no hemos sido capaces de alargar la expectativa de vida con buena salud. Se calcula que actualmente pasamos un 20% de nuestra vida enfermos. De hecho, el principal factor de riesgo para casi todas las enfermedades crónicas es el envejecimiento”.
La lucha contra el envejecimiento no significa querer ser eternamente joven o vivir para siempre, se trata de envejecer con salud para poder tener una vida más plena y feliz. De esta manera, nuestros mayores y nuestro proceso de envejecimiento se beneficiará de estos hallazgos para poder vivir mejor. “Actualmente, afrontamos una fase de intervención en la que pretendemos no curar el envejecimiento, debemos tener en cuenta que hablamos de un proceso fisiológico, no patológico, sino modular el envejecimiento” explica Gómez Cabrera.
Ten en cuenta los últimos hallazgos para configurar unos hábitos encaminados hacia un envejecimiento saludable. Empieza por incluir el café en tu dieta, ya está demostrado que es capaz de prolongar la longevidad y mejorar la calidad de vida.