Pueden aparecer en cualquier momento pero la buena noticia es que pueden tratarse para que desaparezcan lo más rápido posible o bien camuflarlos en cuestión de minutos para que no te arruinen el día. Marta López Álamo es una mujer de recursos y no se pierde un evento por algo tan nimio como un granito en la cara. Apúntate su original forma de disimular imperfecciones porque seguro que puede salvarte de más de un apuro como a ella.
El ingenioso truco de Marta López Álamo para camuflar granitos
Marta se estaba preparando para asistir a un evento y justo le había salido un inoportuno granito en la cara. Ni corta ni perezosa lo camufló de una manera muy ingeniosa cogiendo un gel o pomada de cejas y pintó sobre el granito una peca. Al dibujar una peca el granito obviamente desaparece en favor del lunar, un método muy práctico, rápido y efectivo para disimular una imperfección de última hora que, además, queda muy bien en fotos.
Obviamente no es un tratamiento ni va a hacer que el grano desaparezca más rápido pero sí que es una buena forma de esconderlo durante unas horas, y además, queda incluso chic, un tip que bien podría aplicar la mismísima Marilyn Monroe.
¿Quién no ha pasado por el mismo trance de Marta López Álamo cuando aparece un granito sin previo aviso justo el día que menos lo esperas? Los granitos puntuales en el rostro son más comunes de lo que piensas y, aunque pueden ser molestos, hay formas rápidas y efectivas de tratarlos sin que arruinen tu día (o tu look).
Cómo tratar los granitos puntuales en el rostro
Además del curioso truco para disimularlos de Marta, aquí tienes una guía de emergencia para evitar y tratar granitos inoportunos de manera eficaz:
Limpieza suave: Lo primero es no entrar en pánico y correr a lavar la cara con productos agresivos. La piel necesita mantener su equilibrio, así que lo mejor es usar un limpiador suave que elimine las impurezas sin resecar. Un limpiador con ingredientes como el ácido salicílico es ideal para desobstruir los poros y prevenir que el granito empeore. ¡Ojo! Nada de frotar o usar exfoliantes demasiado fuertes que irriten la piel.
Tratamiento localizado: ¿Ya tienes el granito a la vista? Es hora de aplicar un tratamiento localizado. Busca productos que contengan en su fórmula ingredientes como el peróxido de benzoilo o el ácido salicílico, que ayudarán a secarlo más rápido y reducir la inflamación. Aplícalo directamente sobre el granito con un bastoncillo de algodón y evita extenderlo por todo el rostro. Recuerda, este tipo de productos puede resecar la piel, así que úsalos con moderación y solo en la zona afectada.
No tocar el grano: Sabemos que es muy tentador, pero uno de los peores errores que puedes cometer es tocar o exprimir el granito. Esto no solo puede provocar una infección o cicatriz, sino que también puede extender las bacterias y empeorar la situación. Lo mejor es dejar que los productos hagan su magia y mantener las manos alejadas del rostro.
Tips para combatir los granitos
Aplicar frío: Si el granito está inflamado o doloroso, una compresa fría o un cubito de hielo envuelto en un paño puede ayudarte a reducir la hinchazón. Aplica el frío sobre el área durante unos minutos y verás como la inflamación baja notablemente.
Hidratación ligera y sin aceites: Aunque a veces pensamos que los granitos y la hidratación no se llevan bien, la realidad es que tu piel necesita hidratación, incluso cuando tiene un brote. Elige una crema oil-free o con textura ligera, que no obstruya los poros. Ingredientes como el ácido hialurónico pueden mantener la piel hidratada sin aportar grasa extra, lo que evita que el problema se agrave.
Maquillaje no comodogénico: Si el granito apareció justo antes de un evento importante, ¡no te preocupes! Puedes camuflarlo con un corrector específico para granitos que contenga ingredientes como el ácido salicílico. Este tipo de productos no solo cubren, sino que también tratan el brote mientras lo ocultas. Aplícalo en capas finas y difumina con cuidado. Un poco de polvo translúcido encima ayudará a sellar el maquillaje sin obstruir los poros.
Por último, una vez que llegues a casa, no olvides desmaquillarte correctamente y dejar que la piel respire. Aplicar una mascarilla purificante con arcilla puede ayudar a limpiar los poros y prevenir futuros brotes. Y lo más importante: sé paciente. Los granitos suelen desaparecer en unos días, así que no desesperes y sigue cuidando tu piel con mimo.