Dice la influencer que esta mascarilla es uno de los mejores tratamientos faciales que ha probado. Y si ella lo dice... ¡tenemos que comprobarlo!
Tenemos que hablar del rostro impecable de María Pombo que, todo sea dicho de paso, es fruto de su juventud, y también de técnicas de belleza y del uso de productos cosméticos de calidad demostrada. Por lo que vemos, la influencer invierte mucho tiempo y dinero en experimentar con las mejores marcas para cuidar el rostro. Hoy hablamos de su última recomendación que podríamos calificar como rejuvenecedora. Se trata de una mascarilla, inspirada en la técnica de la crioterapia, y que, por tanto, tiene un importante efecto tensor en un flash, para una piel firme y radiante al instante. De hecho, después de probar este tratamiento, podemos entender que sea uno de los favoritos de María.
Ya hemos hablado en otras ocasiones de la demanda que tienen las técnicas faciales en nuestras famosas. Ella tienen una obsesión con este tipo de tratamientos porque quieren conseguir un efecto tensor y una luminosidad inmediata en la cara. Pero no todo el mundo tiene acceso a los faciales que ellas se hacen casi a diario. Por eso, esta mascarilla es una muy buena alternativa, ya que la forma de aplicación es fácil, es asequible y tiene un efecto rápido.
Las ventajas de la mascarilla con efecto tensor de María Pombo
Se trata de 'Cryo-Flash Cream-Mask' de la firma Clarins, un mascarilla que usa el poder del frío para activar la juventud. Reduce la temperatura de la piel en 2ºC y al tiempo consigue un efecto tensor, descongestionante y refrescante. A la vez, protege la piel contra los radicales libres responsables de envejecimiento, mientras reafirma y tonifica la piel.
Además solo se necesitan cinco minutos para aplicarla sobre el rostro evitando el contorno de los ojos, y a continuación retirar el excedente con agua fría. Su textura de crema ultra fresca es de color azul verdoso, y se desliza suavemente sobre la piel como el hielo logrando un refrescante efecto criogénico intenso e inmediato.
El precio original de esta mascarilla es de 85 euros, pero en Druni la hemos encontrado por 49,30 euros, en bote de 75ml.
No es de extrañar que la esencia de este producto se haya convertido en el favorito de María, ya que además del glow que provoca, tras varias aplicaones se consigue que la piel esté hidratada y confortable ya que tiene acción microcirculatoria y reaviva la luminosidad.