Un maquillaje sencillo, con mesura, bien aplicado y sin estridencias es la clave para triunfar en cualquier evento. Si hay alguien que brilla por su sencillez y sus looks más acertados es siempre Helen Lindes, que nos ha desvelado sus secretos de maquillaje. ¡Ficha sus tips de belleza!

Lo primero que hace la modelo es aplicar un poquito de base en los puntos clave de su rostro que quiera matizar o corregir el tono: frente, nariz, mentón y pómulos. En este punto deberíamos desenfundar una brocha o una beauty blender para integrar mejor la base en nuestra piel. El segundo paso que la influencer toma es aplicar un poco de concealer en las ojeras para unificar el color y dar luminosidad a la mirada. Debemos intentar que nuestro concealer sea un pelín más claro que el tono de la base para darle ese punto de luz a nuestros ojos.

Helen Lindes maquillaje

El siguiente paso es peinar sus cejas con un goupillon, vosotras podéis hacerlo con rímel transparente, o con un fijador normal si lo que queréis es el efecto laminado tan buscado últimamente.

Helen aplica con un pincel de difuminar un poco de sombra en tonos tierra en el párpado superior y, con un pincel biselado, esparce un poco de sombra bajo la línea de pestañas del párpado inferior. A continuación, con un delineador de ojos dibuja un rabillo del ojo clásico y con un grosor fino. Intentad que quede lo más simétrico posible, si lo delineáis siempre en la misma posición, cogeréis práctica. Un truco es levantar con el dedo, muy sutilmente, desde la sien la piel, no mucho o luego quedará caído.

Helen Lindes maquillaje
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Helen Lindes usa un maquillaje discreto pero bien aplicado

Para levantar el pómulo es esencial aplicar un poco de rubor hacia la sien, o bien en crema o en polvo y crear ese efecto lifting que buscamos con la técnica del blush drapping. La modelo aplica iluminador en crema bajo el arco de la ceja y en el pómulo; pero hay que ser cuidadosa o a las pocas horas nuestra cara parecerá demasiado brillante.

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Por último, escoge un brillo de labios o un tinte de labios con poco pigmento, que dejan ese efecto mordida que le da a tus labios un punto de color pero no con una cobertura total.