Desde su debut en televisión hasta convertirse en uno de los rostros más reconocidos del periodismo en España, Susanna Griso ha experimentado una evolución estética notable. Su imagen, siempre impecable y sofisticada, ha sido resultado no solo del paso del tiempo y la madurez, sino también del cuidado y la aplicación de tratamientos estéticos que han mantenido su piel luminosa, tersa y rejuvenecida.
La presentadora del programa de 'Espejo Público' ha demostrado a lo largo de los años un equilibrio entre naturalidad y pequeñas mejoras que han realzado su belleza sin alterar su esencia. A diferencia de muchas figuras del espectáculo que optan por cambios radicales, Griso ha apostado por procedimientos sutiles y efectivos que le han permitido conservar su expresividad sin perder frescura.
Hablamos con la Dra. Beatriz Beltrán, fundadora de la clínica Beatriz Beltrán en Barcelona, quien nos explica toda su trayectoria estética y los tratamientos que han contribuido a su imagen actual.
Sus primeros pasos en televisión y su imagen inicial
Susanna Griso comenzó su carrera televisiva en la década de los 90 en TV3, la televisión autonómica de Cataluña. Con un estilo más natural y una imagen propia de la época, se caracterizaba por su frescura y espontaneidad. En aquellos años, su belleza destacaba por una piel luminosa, una melena corta y una expresión enérgica, sin signos visibles de intervenciones estéticas.
El cambio de Susanna Griso es notable, como se puede ver en esta imagen de 2004.
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Su gran salto llegó en 1998, cuando pasó a Antena 3 para presentar los informativos junto a Matías Prats. En esta etapa, su imagen fue evolucionando progresivamente hacia un estilo más sofisticado y cuidado, pero aún sin evidentes tratamientos estéticos. Sin embargo, el paso del tiempo y la presión mediática de mantener una imagen impecable en pantalla la llevaron, como a muchas otras figuras televisivas, a explorar el mundo de los retoques estéticos para potenciar su apariencia.
El ácido hialurónico y la clave de una piel rejuvenecida
Uno de los tratamientos más populares entre las presentadoras de televisión y actrices es el uso del ácido hialurónico, y Susanna Griso no ha sido la excepción. Con el tiempo, su rostro ha mostrado una mayor firmeza y volumen, especialmente en los pómulos y la zona de los surcos nasogenianos. Este tratamiento es clave para prevenir la flacidez y suavizar las líneas de expresión sin perder la naturalidad.
El ácido hialurónico es una sustancia que el cuerpo produce de manera natural, pero cuya cantidad disminuye con la edad, provocando pérdida de hidratación y firmeza en la piel. Al aplicarse en zonas estratégicas, se logra una apariencia más descansada y tersa sin recurrir a procedimientos invasivos. En el caso de Susanna, su uso ha sido sutil, permitiéndole mantener una piel radiante sin signos de excesos o artificialidad.
El cambio estético de la presentadora Susanna Griso.
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“Vemos miomoduladores en el tercio superior para evitar y suavizar las arrugas de expresión. También rellenos faciales para proyectar pómulo, pero que, a pesar del paso de los años, no se observan en su rostro actual y está muy natural. Creo que también ha utilizado alguna técnica para estimular colágeno, como radiofrecuencia, láser o inyecciones con estimuladores de colágeno por la firmeza de su piel”, explica la doctora.
Además, es probable que la periodista haya complementado estos cuidados con inyecciones de vitaminas para mejorar la luminosidad del rostro. Este tratamiento, basado en cócteles de antioxidantes y minerales, es ideal para revitalizar la piel y prevenir el envejecimiento prematuro.
Susanna Griso se ha hecho pequeños retoques que conservan su esencia natural.
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El secreto de una piel fresca y luminosa
Es posible que haya incorporado técnicas más avanzadas, como el uso de radiofrecuencia o ultrasonidos focalizados de alta intensidad (HIFU), que ayudan a reafirmar la piel sin necesidad de cirugía. Estos procedimientos estimulan la producción de colágeno y mejoran la elasticidad del rostro, proporcionando un efecto lifting progresivo y duradero.
Susanna Griso luce una piel más tersa y casi sin signos de la edad visibles.
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“Como hemos comentado anteriormente, procedimientos como radiofrecuencia e HIFU que mantienen piel firme y radiante, sobre todo para la zona de los ojos, porque se aprecia que, a pesar del paso de los años, el párpado se mantiene igual. Eso nos podría sugerir que se ha realizado estas técnicas en esta zona”, afirma la especialista.
Por otro lado, no hay que descartar tratamientos dermatológicos complementarios, como los peelings químicos o el láser fraccionado, que ayudan a unificar el tono, reducir manchas y mejorar la textura de la piel.
En combinación con una rutina de cuidado personalizada y una alimentación equilibrada, estos retoques sutiles permiten a Susanna Griso lucir una imagen impecable y juvenil sin necesidad de cambios drásticos. “Cuidados de la piel desde limpiezas como hidrodermoabrasión, láser IPL que corrige las manchas de color y la luminosidad de la piel”, añade.
No olvidemos el conocido botox
Otro de los tratamientos estéticos más comunes entre las presentadoras de televisión es el uso de toxina botulínica, más conocida como botox. Esta sustancia se aplica principalmente en la frente, el entrecejo y el contorno de los ojos para suavizar las arrugas dinámicas y prevenir la formación de líneas de expresión profundas.
Es probable que Susanna Griso se haya pinchado botox para evitar las arrugas.
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En el caso de Susanna Griso, su rostro ha mostrado un aspecto rejuvenecido con el paso de los años, sin las arrugas marcadas que suelen aparecer en la zona del contorno ocular y la frente. Esto sugiere que ha recurrido a pequeñas dosis de botox para mantener su mirada abierta y descansada, evitando el temido "efecto congelado" que ocurre cuando se abusa de este tratamiento. Todo ello contribuye a una imagen fresca y despierta, fundamental en una profesión que requiere largas jornadas frente a las cámaras.
Una imagen natural y cuidada: la filosofía estética de Susanna Griso
A diferencia de otras celebridades que optan por cambios drásticos, Susanna Griso ha mantenido una línea de retoques sutiles, apostando por mejoras progresivas que realzan su belleza sin alterar su esencia. Su filosofía estética se basa en la prevención y el mantenimiento, utilizando tratamientos que potencian su imagen sin caer en excesos.
Susanna Griso presume de una imagen natural y rejuvenecida.
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Uno de los aspectos más valorados de su evolución es la naturalidad con la que ha abordado estos procedimientos. En su caso, ha sido transparente en varias entrevistas sobre el cuidado que dedica a su piel y la importancia de sentirse bien consigo misma. Esta sinceridad ha sido muy bien recibida por el público, normalizando el uso de la medicina estética como una herramienta para mejorar la autoestima sin alterar la identidad personal.
“Recomiendo acudir a un profesional que te haga una valoración global, que te acompañe en todo tu proceso de envejecimiento y que no solo piense en tratar la zona que nos preocupa en este momento, sino que hagamos prevención y corrección de aquellas cosas que necesitamos sin abuso ni estridencias”, sentencia la doctora.
Con una carrera consolidada y un estilo que sigue marcando tendencia, podemos afirmar que la presentadora Susanna Griso continúa siendo una referencia tanto en el ámbito periodístico como en el mundo de la belleza.