El invierno puede traer algunas consecuencias poco deseables como la deshidratación de la piel. Esta falta de humedad en la piel es un problema muy frecuente, no solo por el frío, también por los cambios bruscos de temperatura, las calefacciones, las duchas muy calientes, la menor humedad en el ambiente… esto genera un entorno poco favorable para la barreta cutánea que pierde agua con mayor facilidad, dando lugar a sequedad, descamación, tirantez y una sensación incómoda en la piel. Una buena crema corporal es un verdadero salvavidas para sobrevivir al invierno.
El invierno, ¿enemigo de la piel?
En realidad ninguna estación es enemiga de la piel, solo hay que saber adaptarse para cuidarla y darle en cada momento lo que necesita. ¿Qué ocurre en invierno? Uno de los principales responsables es el contraste entre el frío exterior y el calor seco de los interiores, provocado por el uso de sistemas de calefacción. Este cambio brusco afecta la capa lipídica que retiene la hidratación de la piel, haciéndola más vulnerable y menos capaz de retener la humedad. Además, factores como duchas calientes, el uso de productos agresivos o la falta de hidratación interna (por no consumir suficiente agua) agravan aún más este problema.
En invierno, la piel también tiende a sufrir una reducción en la producción de sebo, un elemento esencial para mantener su elasticidad y protección natural. Esto es especialmente evidente en las áreas más expuestas, como el rostro, las manos y los labios, que tienden a resecarse y agrietarse con más facilidad. Sin un cuidado adecuado, la deshidratación puede acelerar el envejecimiento cutáneo, dejar la piel más opaca y provocar molestias.
Una piel deshidratada provoca tirantez, picores, incomodidad, descamación… síntomas nada apetecibles y que se pueden remediar o prevenir rápidamente si utilizamos una buena crema hidratante a diario. Nagore Robles utiliza su crema corporal de Mixa después de la ducha, con la piel aún un poquito húmeda, de esta manera facilitamos la hidratación y el sellado de la humedad en la piel por lo que permanecerá durante más tiempo hidratada.
Consejos para mantener la piel hidratada en invierno
Además de usar a diario crema hidratante y aplicarla con la piel aún húmeda, hay otras recomendaciones que van a hacer que tu piel esté más sana y cuidada en época de frío:
- Evita las duchas largas y muy calientes: Aunque pueden ser tentadoras en invierno, el agua caliente puede despojar la piel de sus aceites naturales, provocando sequedad. Opta por agua tibia y reduce el tiempo bajo la ducha.
- Exfolia suavemente una vez a la semana: La exfoliación elimina las células muertas que se acumulan en la superficie de la piel, permitiendo que los productos hidratantes penetren mejor. Utiliza un exfoliante suave o guantes exfoliantes para no irritar la piel.
- Protege tu piel del frío extremo: Usa ropa adecuada, como guantes y bufandas, para proteger las áreas expuestas del viento y las bajas temperaturas. Esto ayudará a evitar la pérdida de humedad y la irritación.
- Hidrata desde el interior: Bebe suficiente agua durante el día, incluso si no sientes tanta sed como en verano. También puedes incorporar infusiones o tés calientes para mantenerte hidratada y evitar la sequedad de la piel.
- Utiliza un humidificador en casa: La calefacción tiende a resecar el ambiente, lo que afecta directamente a la piel. Un humidificador ayuda a mantener un nivel adecuado de humedad, favoreciendo la hidratación natural de la piel.
- Evita jabones agresivos: Opta por geles de ducha o jabones con fórmulas hidratantes que respeten el equilibrio natural de la piel. Los productos con aceites o sin sulfatos son una excelente opción en invierno.
- Presta especial atención a las áreas más propensas a la secuencia: Rodillas, codos, manos y pies suelen ser las zonas más afectadas. Aplica cremas más densas o bálsamos específicos para mantener estas áreas protegidas y nutridas.
- Usa aceites corporales como complemento: Los aceites, aplicados después de la ducha o incluso mezclados con tu crema habitual, forman una barrera protectora que evita la pérdida de agua en la piel. Haz la prueba.
Apúntate la crema corporal de Nagore Robles y otras de nuestras fórmulas favoritas para mantener hidratada la piel del cuerpo en invierno:
Bálsamo reparador Urea Cica Repair+ de Mixa (7,99€ / 400ml)
Esta es la crema favorita de Nagore. Es la crema superventas de la marca porque se trata de una fórmula restauradora a base de un 10 % de urea y niacinamida. Deja la piel reforzada, más suave, hidratada y protegida. Es básico para pieles secas y también rugosas por su suave acción exfoliante y calmante.
Loción corporal Cica Reparación Intensa de Neutrogena (9,90€ / 400ml)
Su fórmula ha sido mejorada añadiendo centella asiática como principal ingrediente. Es una crema muy hidratante que mejora la barrera de la piel desde el primer uso. Es antioxidante, calmante y mejora la calidad de la piel. Es ideal para el invierno, para pieles irritadas y pieles muy secas. Un básico.
Bálsamo Ultra Hydratant de Topicrem (11,95€ / 380ml)
Este bálsamo corporal para toda la familia cuenta en su fórmula con manteca de karité, cera de abeja, urea, glicerina y aceites vegetales. Protege la piel de los efectos del frío y de los factores desecantes como el agua dura o el viento. Aporta una nutrición continua durante 48 horas y nada más aplicarlo reduce en un 50 % la sequedad. No es magia, es Topicrem.