Hace unos días, Amaia Salamanca compartía en su cuenta de Instagram una selfie en la que aparecía, más sencilla de que costumbre, presumiendo de su melena al natural. En ella podíamos ver a la actriz que triunfó gracias a su papel de Cata en la serie Sin tetas no hay paraíso posando con su pelo sin tintes ni químicos, luciendo orgullosa sus canas. Bajo el título de «Sin filtro ni filtros», la publicación y el pie de foto dejaban bastante clara la intención de la artista. Y es que ella ha decidido presentarse al mundo tal y como ella es sin potingues de por medio. Una decisión con la que no podemos estar más de acuerdo y que nos resulta ideal. ¡Viva la naturalidad!

Como ella, durante los últimos años han sido muchas las famosas que han intentado dejar a un lado esa perfección absurda que se les exige a las mujeres y han empezado a lucir sus melenas con reflejos plateados de lo más favorecedores. No se trata de un despiste o de una cana suelta. Todo lo contario. Se trata de un look atrevido y hecho totalmente a conciencia, que apuesta por la más sincera naturalidad y que, por qué no, también les sienta de maravilla a todas ellas.

5 famosas que, como Amaia Salamanca, han dejado ver sus canas

Como la actriz con nombre de ciudad, han sido muchas las celebs que han dejado de teñir su pelo para acudir a eventos o actos oficiales. Entre ellas, compañeras de profesión como Salma Hayek, Demi Moore o Ángela Molina; pero también royals europeas como Carolina de Mónaco, que presumió de melena canosa el pasado 19 de noviembre con motivo del Día Nacional de Mónaco; o la Reina Letizia, que durante el confinamiento apostó por autenticidad más acertada en su melena.

Una auténtica muestra de que todas ellas son mujeres seguras de sí mismas, a las que les importa un bledo el qué dirán y a las que ya no les incomoda dejar de estar perfectas en todo momento. Algo que no nos disgusta en absoluto y que, cómo no, aplaudimos desde aquí. Aceptarse tal cual una es no puede ser más sano y ellas parecen tan saludables como bellas. ¿Qué os parece a vosotras? ¿Os animaríais a dejar vuestras canas crecer o no sabéis vivir sin vuestro tinte ni peluquera de confianza?