La aparición de líneas de expresión y arrugas en nuestro rostro es, sin lugar a dudas, uno de los primeros grandes cambios que notamos a partir de cierta edad. Después llegan las manos, las manchas y otros signos de la edad que intentamos combatir (y prevenir) con cremas y rituales de belleza de lo más estudiados. Cuaquiera, a partir de los 45 o 50 años, quiere parecer más joven y disimular las arruguitas que aparecen en los párpados o en las comisuras de los labios. Es normal.
Sin embargo, y aunque queramos hacer todo lo posible por eliminarlas, tenemos que tener claro que las arrugas son naturales. Las arrugas existen sí, pero no debemos martirizarnos con ellas. Querer eliminarlas por completo de nuestra piel es prácticamente imposible. Lo que sí que podemos hacer es intentar disimularlas, darle otro aspecto. Y eso se consigue gracias al maquillaje. Concretamente, a través de estos ocho fáciles consejos.
Crema solar, por favor
La exposición solar es, quizás, la principal culpable del envejecimiento de nuestra piel y, si queremos evitarlo y tener una piel suave y libre de arrugas y posibles enfermedades, tenemos que añadir a nuestra rutina de belleza cremas solares que nos protejan de la radiación UVA y UVB.
Prebase, siempre prebase
Las prebases son productos que, tal y como su nombre indican, deben aplicarse antes de la base de maquillaje. Su objetivo no es otro que suavizar el rostro, cerrar los poros, disimular las arrugas e imperfecciones e hidratar la piel antes de llenarla de potingues y polvos. ¡Una marailla que marca la diferencia!
Adiós, ojeras
Para ello necesitará un buen corrector, cuya función básica es siempre difuminar las marcas que aparecen alrededor de tus ojos. Cógelo de un tono más claro que el de tu base de maquillaje y así conseguirás, además, iluminar esa zona y parecer más joven.
Tonos tierra en los párpados
No hay más que usar una paleta de sombras marrones, ocres y terracotas (que son las que mejor disimulan las arrugas y más profundizan nuestra mirada); y con ella pigmentar nuestros párpados y la línea inferior de nuestros ojos, para darle un aspecto mucho más joven a nuestra mirada. Fácil, sencillo y muy efectivo.
A tope de cejas
Las cejas finas y poco pobladas dan la sensación de que somos más mayores, nos envejecen. Es por ello por lo que es imprescindible usar un buen lápiz de cejas. Debemos asegurarnos de elegir el tono que más se parezca al de tu cabello y triunfa como nunca.
La clave del iluminador
Los iluminadores o highlighters aportan luminosidad gracias al concentrado de pigmentos cristalinos que contienen. Bien aplicados, en mentón, punta de la nariz y pómulos, darán a nuestro rostro un aspecto ideal.
Un poco de rubor
Un toque de blush en el lugar adecuado puede ayudarnos a tener un aspecto inmediato de buena cara. ¿Y quién de nosotras no quiere eso? Hay que aplicarlo a toquecitos en nuestros mofletes y así nuestro rostro podrá parecer más joven.
Rejuvenece tus labios
Los perfiladores de labios, además de agrandar nuestros morritos, también eliminarán esas pequeñas arruguitas que encontramos alrededor de nuestra boca. Lo ideal para parecer más joven es utilizarlos para dibujar la forma del labio, pero añadiendo unos milímetros extra hacia el exterior.