El verano es sinónimo de sol, playa, piscina y diversión, pero también puede ser la temporada más desafiante para nuestra piel. Y si ya estás empezando a notar los estragos, atenta, la Dra. Lara Victoria, médico-estético, experta en estética regenerativa y portavoz de Druni, desvela los consejos definitivos para mantener nuestra piel hidratada y sana durante la época estival. Sigue estos pasos y asegúrate de que en el nuevo curso tu piel luzca radiante y libre de los daños causados por el cloro de las piscinas, el salitre del mar y la radiación solar. 

Eugenia Silva playa

La piel sufre en verano más que nunca, y por ello debes protegerla especialmente.

(@Eusilva)

Dúchate después de nadar

El cloro de las piscinas y el salitre del mar pueden ser extremadamente secantes y agresivos para la piel. Por ello, lo más recomendable es ducharse inmediatamente después de nadar, para eliminar estos agentes irritantes. Usa un gel de ducha suave y sin sulfatos, y asegúrate de secar tu piel con suavidad para evitar irritaciones.

No pares de hidratar

El sol y el calor pueden deshidratar la piel rápidamente. Para combatir esto, es esencial mantener una hidratación adecuada tanto por dentro como por fuera. La clave es beber al menos dos litros de agua al día, para mantener la piel hidratada y elástica. Además, utiliza siempre una crema hidratante ligera pero efectiva, que contenga ingredientes como el ácido hialurónico, la glicerina o el aloe vera, que ayudan a retener la humedad en la piel. "Aplicar una crema después de la ducha ayuda a sellar la humedad y a mantener la piel suave y flexible”, señala la Dra. Lara Victoria.

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Es fundamental que hidrates bien tu piel después de una jornada de playa.

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Exfolia con cuidado

La exfoliación es clave para eliminar las células muertas y evitar que tu piel luzca opaca, sin brillo, ni vida. Sin embargo, es importante no excederse, ya que la exfoliación excesiva puede dañar la barrera protectora de la piel. Opta por un exfoliante suave, una o dos veces por semana. "Un exfoliante con partículas finas o uno químico conácido láctico o glicólico puede ser muy efectivo y menos agresivo", explican los expertos de Druni.

Refuerza tus defensas

Es importante que durante todo lo que quede de verano refuerces la barrera protectora de tu piel. Los productos que contienen ceramidas y niacinamida son excelentes para restaurar y mantener la barrera cutánea. De hecho, mantener una función barrera equilibrada se traduce en una piel sana y más luminosa. Además, recuerda: si la barrera cutánea se deteriora, puede desencadenar otros problemas en la piel, como enrojecimiento, sensibilidad e incluso brotes de acné.

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Si refuerzas las defensas de tu piel, sufrirá menos los daños del cloro y la sal.

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Ponte protección solar

Da igual si ya estás morena, la protección solar debe ser un hábito diario, incluso en días nublados o si no planeas estar mucho tiempo al aire libre. Y no que debes aplicarlo generosamente en todas las áreas expuestas de la piel y reaplicar cada dos horas o después de nadar o sudar. 

Presta atención a los labios

Los labios y el cuero cabelludo son áreas que a menudo olvidamos proteger, pero son igualmente vulnerables al daño solar. Usa un bálsamo labial con SPF y un spray protector para el cuero cabelludo. Con estos consejos tu piel lucirá sana, cuidada y radiante cuando dé comienzo en nuevo curso. ¡Empieza ya!