La bajada de las temperaturas, la calefacción, la contaminación, hacer deporte, los cortes de capas largas y enteras, el cabello fino, problemas en el cuero cabelludo... Son solo algunos de los factores que hacen que tu pelo se ensucie más y en menos tiempo. Alberto Sanguino, Director de Educación de Llongueras revela 10 trucos para que el cabello dure más tiempo limpio. Así lucirás una melena limpia, suave, con movimiento y brillante más de dos días.
Cómo lavarlo. Asegúrate de realizar un correcto lavado del cabello y, en concreto, del cuero cabelludo. Para ello, frota con la yema de los dedos realizando pequeños movimientos circulares hasta conseguir espuma. Con ciertos champús, este es un indicador de que el cabello se está quedando limpio. Después, aclara con abundante agua. No olvides frotar en puntos como: detrás de las orejas, nuca o coronilla.
Tipo de champú. Evita el uso de champús nutritivos, reparadores y anti encrespamiento o alisadores. Estos productos contienen siliconas y aceites que se depositan en el cuero cabelludo generando grasa y apelmazando el pelo. En su lugar utiliza un champú de uso frecuente, de Ph neutro, apto para todo tipo de cabello.
Mascarillas y acondicionadores. Intenta no abusar del uso de mascarillas y acondicionadores. Aplica este producto en la zona de las puntas y evita las raíces. Una excesiva nutrición del cabello puede aportar peso y aumentar la sensación de pelo sucio.
Cómo debo aclararlo. Evita el último aclarado con agua caliente, ya que esta activará la creación de grasa en el cuero cabelludo. El agua fría activa la circulación del folículo piloso y evita una pronta formación de grasa.
El secador. Evita incidir directamente sobre el cuero cabelludo con el aire caliente del secador. Da volumen al cabello con la cabeza boca abajo y despegando la raíces con aire más templado.
Productos styling. Los acondicionadores sin aclarado, sérums y productos de styling aportan peso, apelmazan y aumentan la probabilidad de ensuciar el pelo.
¿Cada cuánto se debe lavar el pelo?
Cuándo lavarlo. Evita lavarte el pelo antes de dormir, ya que cuando pones el pelo sobre la almohada esta entra más en contacto con el cuero cabelludo y es más fácil que la grasa pase al cabello, que pierda volumen y que, si todavía está un poco húmedo, coja forma y se quede pegado. Intenta lavarte el cabello a primera hora del día.
Distancia entre lavados. Procura espaciar el tiempo entre lavado y lavado. El cuero cabelludo debe tener un nivel mínimo de grasa y si se lo quitamos todos los días activará su rendimiento y generará cada menos tiempo para no sentirse desprotegido.
Champú en seco. Usa champú en seco, hazte coleta pulida, ponte diadema... Son recursos perfectos para todos esos días que quieras espaciar el lavado y así podrás disimular la suciedad. Verás cómo enseguida el pelo te aguanta más tiempo.
El azúcar. Evita el consumo de azúcar y harinas refinadas ya que pueden producir problemas metabólicos que conlleven a segregar más sebo en el cuero cabelludo y un exceso de impurezas.