Hace unos meses quizá nos podría parecer impensable, pero ha llegado el día. Telecinco vuelve a abrir las puertas de Guadalix de la Sierra para poner en marcha una nueva edición de 'Gran Hermano VIP'. Muchos lo definen como el reality por excelencia, de hecho fue el primero que se emitió en la televisión española. Para los expertos en el sector de la televisión, su vuelta supone uno de los pocos balones de oxígeno con los que podría contar Telecinco en esta nueva temporada. La cadena, que lleva meses sumida en una profunda crisis de audiencia cada vez más preocupante, necesitaba desempolvar al que fue uno de sus buques insignia. La marca 'Gran Hermano' llevaba 4 años en barbecho, desde el escándalo que azotó al programa con el abuso sexual que se produjo en una de sus ediciones de anónimos.
Desde entonces, poco se sabía del reality, salvo un intento que tuvo la anterior directiva de recuperarlo en el otoño del 2021 y que acabó siendo desechado. Ahora vuelve la vida en directo y vuelve más viva que nunca. Telecinco quiere despertar en los espectadores esa curiosidad que les hizo asomarse hace 23 años al primer GH. Buscan que la edición sea un golpe de efecto a todos los niveles, pero especialmente en audiencias: “Para la cadena que funcione Gran Hermano es vital, lo están apostando casi todo a esta carta y están convencidos de que será el bombazo que necesitan ahora, como lo fue en su día el reestreno de Operación Triunfo en 2017. La nostalgia vende y para la directiva menos de un 14% de share sería un fracaso, teniendo en cuenta lo caro que es el formato”, confiesa a SEMANA un trabajador de la cadena de Fuencarral.
El golpe de efecto de Telecinco
Y para conseguir este ‘golpe de efecto’ los directivos de Mediaset tenían claro que debían sorprender. La estrategia parece clara: mantener la esencia pero cambiar todo lo demás. Y así se hizo desde que se anunciase oficialmente su vuelta el pasado mes de junio. ¿El primer cambio? Su presentadora. Marta Flich toma las riendas de esta nueva edición del concurso sustituyendo a Jorge Javier Vázquez: “Me enfrento al reto con muchísimo respeto, con muchísimas ganas y con muchísima emoción. Es el formato de entretenimiento por excelencia, no hay trampa ni cartón, se ve todo en directo. Es un programa como los que ya no quedan, de esa autenticidad y con esa verdad para el público. El espectador de gran hermano es super exigente, disfruta de cada segundo”, nos decía una Marta muy emocionada ante su estreno como presentadora del VIP, labor que compartirá con Ion Aramendi, que se pondrá al frente de los debates dominicales.
Casa y plató totalmente renovados
Pero las novedades no quedan ahí. El reality estrena un espectacular plató de casi 1.000 metros cuadrados y 10 metros de altura con más de 230 metros cuadrados de pantallas led de alta definición -convirtiéndose en uno de los platós de referencia en este aspecto en la televisión española- y más de 150 de focos robotizados. Aunque la casa tendrá también más protagonismo que nunca, ya que ha sido remodelada por completo. En lo que respecta a su nueva y llamativa decoración, cuenta con elementos elaborados con materiales reciclados en un espacio acogedor con un diseño muy vanguardista.
Un casting con incógnitas
Lo que parece toda una incóngita, a pesar de situarnos en el día del estreno, son los concursantes. La cadena y la productora han decidido no confirmar a nadie más que Sol Macaluso para mantener así la expectación en su estreno. Así las cosas, las demás identidades se revelarán esta noche en el arranque de su gala inaugural. Todos ellos se conocerán y se reunirán por primera vez una vez que crucen el umbral de la casa de Guadalix de la Sierra, donde vivirán una experiencia que será emitida 24 horas en directo en Mitele y Mitele PLUS y cuyo ganador final será elegido, como siempre, por la audiencia.