El 20 de julio se destaparon las estrategias entre los grupos de '¡Vaya vacaciones!'. En plenas nominaciones, los concursantes confiesan seguir un planteamiento en dos grupos diferenciados, el "pink power" y el resto. Marta Peñate era quien terminó desvelando en directo ante Luján Argüelles la existencia de este tipo de pactos para echar a determinadas parejas. Desde el principio calcularon que esa noche se podría producir un empate y que serían los inmunes, Jorge Pérez y Cristina Porta, los que resolvieran a favor del grupo que ya habían hablado. Álex y Luna se mostraron muy molestos de nominar a Rubén y no seguir lo que ellos pensaban por sumar al grupo.

Los concursantes de '¡Vaya vacaciones!' en su villa
Los concursantes de '¡Vaya vacaciones!' se echan en cara sus nominaciones (Foto: Telecinco).

"Aquí has jugado por doble, te has metido en un grupo para que no te nominen y salió Cristina por lo mismo. Aquí hay organizada una estrategia, somos varios. Habíamos quedado que, por honra de boicotear su prueba, salvaríamos a Aguasantas", expuso. Un hecho que se sucedió cuando Javier, Rubén y la propia Aguasantas recibieron 4 puntos cada uno. Estalló entonces la división entre todos, que se acusaban de poner el juego por encima de los demás. "Esto me parece como un clan mafioso. Una manera de jugar...o se vota quien yo digo o sois unos traidores", intentó entender Makoke que terminó aún más distanciada de Tony Spina. 

"Ayer nosotros teníamos que haber abierto los ojos, ser inmunes a este plan"

Luna y Álex mantuvieron lo prometido y terminaron votando a Rubén a pesar de que no era lo que hubieran preferido. Luego, al ver a Javier- Makoke y Rubén-Carmen al borde de la expulsión se arrepintieron. La casa se llenó entonces de reproches que continuaron durante la noche y al día siguiente. "Estoy muy arrepentida de haber pasado por encima de mi y que me hayáis dado mis vacaciones", les recriminó la ex concursante de 'MasterChef'.Tanto ella como su hermano estaban convencidos de que "teníamos que haber abierto los ojos, ser inmunes a este plan" y lo único que pedían es que sus amigos permanecieran una semana más. Tony Spina no entendía que ellos fueran los señalados y se defendían ante las acusaciones: "Me molesta que digan que somos los capos, que viven con miedo...nunca hemos obligado a nadie a hacer una estrategia, ellos lo han querido hacer con nosotros".