Eduardo Casanova ha demostrado una vez más que la repostería no es lo suyo, esta vez en la última gala de 'Masterchef Celebrity'. una falta de destreza que le ha valido la expulsión sin derecho a réplica. El actor debía replicar una tarta de varias capas, propuesta por una exconcursante del 'reality' de RTVE en su versión civil. Ana, la andaluza que participó en la edición 11 de 'MAsterchef' y a la que, cariñosamente, apodan 'La tonta de las flores'. El madrileño, conocido por su papel de Fidel en la serie 'Aida', no ha sido capaz de presentar ante Pepe, Samantha y Jordi, los exigentes jueces, un postre que tuviera sentido.
Eduardo Casanova, Toñi Moreno, Blanca Romero y Laura Londoño ante una de las pruebas más complicadas de 'Masterchef Celebrity'
Se había convertido en uno de los aspirantes de 'Masterchef Celebrity' que más momentos divertidos y desternillantes ha protagonizado. También uno de los que más cerca de la eliminación ha estado en esta edición, la número ocho. Esta vez, no ha conseguido salvarse. Ni por asomo. Debía enfrentarse, además, con tres pesos pesados del programa gastronómico: la colombiana Laura Londoño, Toñi Moreno y Blanca Romero.Los cuatro quedaban a las puertas de la eliminación tras perder la prueba de exteriores contra el equipo de Jesulín de Ubrique, Daniel Illescas, Jorge Cadaval de Los Morancos, Álvaro Muñoz Escasi y el actor Miguel Diosdado. Los cinco hombres han tenido el privilegio de presenciar la dura contienda desde la galería, con la tranquilidad de que se mantienen en 'Masterchef Celebrity' una semana más. Entre todos ellos, quizá si hay uno que está dando la sorpresa en esta edición es el torero. Jesulín está dejando claro programa tras programas que sus dotes en la cocina no son producto de su participación en el formato, sino que vienen de lejos.
"Ni en la boda de la Pantoja", ha sido la divertida reacción de Toñi Moreno al ver la tarta que debían replicar
"Ni en la boda de la Pantoja. ¿Pero cuántos pisos tiene esa tarta?", se lamentaba Toñi Moreno nada más ver la tarta que tenían que replicar. Una prueba de dos horas de duración y especialmente complicada con muchas elaboraciones que las tres mujeres han sabido resolver a pesar del estrés evidente. "Hemos salido de peores", se sinceraba la presentadora durante el cocinado.En el caso de Eduardo Casanova, ni la suerte ni sus limitados conocimientos en repostería le han servido para sacar adelante el plato. "Es una sensación extraña la que tengo", ha comenzado diciendo cuando le ha tocado el turno de presentar su tarta ante los jueces. "No sé si está buena, pero si pones esta tarta entre mil tartas creo que se reconoce que es la mía", ha tratado de defenderse el aspirante del programa de la televisión pública. Unas declaraciones que han arrancado las risas de Jordi Cruz, Samantha Vallejo-Nájera y Pepe Rodríguez, incapaces de dar por válido su plato.Finalmente, Eduardo ha tenido que decir adiós visiblemente afectado. "Lo mejor de estas siete semanas ha sido haber perdido el miedo. Es un programa de cocina en el que no solo aprendes a cocinar, sino que te conoces a ti mismo", ha confesado el joven de 32 años en su despedida.