En los años 80 el apellido Sánchez Vicario era sinónimo de éxito. Gracias al talento en las pistas de Arantxa, la familia se fue haciendo un hueco en el panorama social para convertirse en uno de los clanes más importantes y ricos del momento. Un patrimonio que Arantxa Sánchez Vicario decidió dejar en manos de sus padres para que ella solo tuviera que estar pendiente de lo que pasaba en la cancha de tenis.
Sin embargo, lo que parecía un trato provechoso para ambas partes se terminó convirtiendo en una pesadilla para la tenista, que descubrió por casualidad que sus padres invertían parte de su fortuna sin consultárselo. Así lo desveló Mónica Ponte, íntima de Arantxa, en el programa ‘Lazos de sangre’.
Toda la familia
“Incluso sus hermanos se beneficiaban de todo lo que ella había trabajado”, explicaba Pont. “Crecía y los poderes seguían a nombres de mis padres”.
Infancia en soledad
Con apenas 14 años se separó de su familia para preparar la que sería una meteórica carrera en Marbella, donde se sintió muy sola.
Una adolescente ingenua
Según María Escario, “Arantxa, hasta bastante mayor, siempre ha sido muy ingenua, muy niña. Toda esa fuerza que tenía en la pista luego, en la vida real, era una persona frágil".
Bajo control
“Su adolescencia estuvo arrebatada por el tenis. Arantxa no salió de fiesta por la noche hasta el día que ganó el Roland Garros, estaba muy controlada por sus padres”, explicaba la periodista
Campeona en las pistas
Sus amigos más cercanos han reconocido en el programa que si bien fue la reina de las pistas nunca lo fue de sus finanzas.
De la familia a Josep
Tras alejarse de su familia, Arantxa confió en su ya exmarido, Josep Santacana, algo de lo que también se arrepiente a día de hoy.
Se sentía sola
A pesar de todo, en opinión del forense José Cabrera Arantxa se volcó en su marido porque Vicario dudaba de si su madre la quería o si solo deseaba que fuese la mejor tenista. “Tener esa duda siendo casi niña es muy doloroso”.
Todo en sus manos
“Arantxa le dejó todo su patrimonio a su marido porque nunca había sido capaz de gestionar ni de conocer. Nunca se ha preocupado de sus finanzas”, aseguró su abogado, Maurice Kutner.
En busca del amor
A pesar de todo, lo que “Arantxa lo que buscaba con ese matrimonio (con Santacana) era tener a la familia que no había tenido” asegura María Escario