Han pasado 18 meses desde que Álex Lequio falleciera y, aunque es cierto que este dolor siempre la acompañará, Ana Obregón poco a poco va recuperando su vida. A pesar de que la tristeza que le invade es innegable, la actriz está volviendo a salir de casa. Pocos días después de que se confirmara que volverá a dar las campanadas este año en compañía de Anne Igartiburu, ha reaparecido en un evento solidario de la institución Ronald McDonald que tiene como objetivo ayudar a las familias de niños con graves problemas de salud que se ven obligadas a trasladarse de su ciudad, ofreciéndoles un hogar para que puedan acompañarlos durante su tratamiento médico.

Ana Obregón, solidaria con los niños enfermos de cáncer

Siguiendo la estela de su hijo Álex Lequio, que aprovechaba las semanas previas a la Navidad para organizar actos solidarios (cuyos beneficios estaban destinados siempre a la lucha contra el cáncer), Ana Obregón ha querido aportar su granito de arena estando presente durante la inauguración de esta iniciativa, que consistirá en donar todo lo recaudado con la venta del clásico Big Mac de Macdonals a esta Fundación Infantil. "Para una madre o un padre, sus hijos son lo más importante en el mundo, y sentir que tienes un respaldo y un hogar al que acudir en momentos especialmente complicados, te da esperanza", ha confesado visiblemente emocionada la actriz.

Todo al blanco en su look más básico

Estamos acostumbradas a ver a Ana Obregón siempre guapísima y esta vez no iba a ser menos. La bióloga estaba radiante vestida completamente de blanco, aunque lo cierto es que nos gusta tanto cuando reaparece y podemos analizar de arriba a abajo sus looks, que esperábamos un poco más.

La presentadora, como no podía ser de otra manera, se ha decantado por el color blanco impoluto. "El blanco es el color del luto en el budismo, en muchas religiones y en muchos países. Y yo todavía estoy guardando luto por mi hijo" explicaba hace unos meses cuándo le preguntaban por qué casi siempre elegía ese color en todas sus salidas públicas. Ana, para este evento tan especial, ha elegido una camisa de seda levemente transparente que ha anudado en su cintura, y un pantalón de pinzas de tiro alto acampanado y con cinturón incorporado. ¿En los pies? Unos botines de tacón con punta redondeada de la misma tonalidad.

Con pocas joyas y apostando por un maquillaje muy natural

La actriz madrileña, de 66 años, ha preferido no sumar prácticamente joyas a su estilismo. Únicamente ha lucido un anillo con brillantes y un bonito collar a juego con la inicial de la letra A, en honor a su hijo Álex. En el maquillaje Ana tampoco ha querido arriesgar demasiado y ha optado por añadir un color amarronado a sus labios y una mezcla de tonos tierra a sus ojos. Y es que tampoco le hacía falta mucho más, la que es guapa es guapa. ¿Quieres verla ya? ¡Sigue bajando!