La tendencia llegó el invierno pasado, pero en realidad nunca ha llegado a irse, porque cuando llega el frío, los abrigos nos gustan de todos los modos y colores, siempre y cuando cumplan su función principal, que es la de protegernos frente a las bajas temperaturas. Si bien es cierto que, si pueden hacerlo con un toque de luz como el abrigo de Tamara Falcó, pues mejor que mejor, porque ambas cosas son posibles. Y a la vez, y todo gracias a un abrigo blanco.
De escapada por el sur
La hija de Isabel Preysler ha estado estos días en Andalucía aprovechando el puente para hacer una escapada. Se ha ido con su novio Íñigo Onieva, y con él ha recorrido algunos de los lugares más idílicos de la comunidad autónoma. Entre ellos, ha visitado la Alhambra, donde la pareja ha posado en los rincones más destacados, como los jardines del Generalife y ahí es donde hemos podido ver el outfit de Tamara en todo su esplendor.
Falcó eligió para lo jornada de turismo un estilismo de lo más cómodo, pero a la vez supo darle este toque diferenciador que siempre eleva sus looks, aunque sean de Street style. La joven se decantó por un jersey de cashemere de color rosa, unos pantalones vaqueros tipo mom, con las perneras un poco más anchas y un calzado cómodo.
Un abrigo para dar luz
El remate es un abrigo blanco que, como decimos, aunque no es tendencia esta temporada, le da un toque de luz a un estilismo perfecto para pasear por cualquier ciudad. El suyo es de American Vintage de una temporada anterior, pero, por suerte para quienes quieran copiar el estilismo de Falcó, hay opciones similares en otras firmas para que nos inspiremos en ella.
El de Tamara no tiene botones sí un par de bolsillos en los laterales, pero hay muchas otras versiones que quizá se adaptan más a las bajas temperaturas de otras zonas del país. Por ello se puede apostar por diseños con doble botonera, con cierre en forma de bata y largos hasta las rodillas.
Incluso hay diseños que vienen con capucha y completamente cerrados en la parte superior, para esos días en los que sopla el viento y hay que hacer frente al frío. Una buena opción además para poner un poco de luz a nuestro estilismo y, por qué no, también a esos días en los que necesitamos darle un toque distinto a todo.