Ha sido una de las sorpresas de esta nueva temporada de El Hormiguero y, sin duda, una de las más gratas. Tamara Falcó se estrenó en el prime time de Pablo Motos hace justamente un mes y, desde entonces y semana tras semana, ha ido derrochando desparpajo pero también estilazo. Aunque podemos verla cada mañana junto al prestigioso chef Javier Peña en Cocina al punto con Peña y Tamara y pronto como jurado en El Desafío, el nuevo concurso de Antena 3; sus looks más espectaculares llegan por la noche. Semanalmente, la hemos visto con prendas de lo más elegante pero siempre dando ese toque TFP tanto nos gusta. Y anoche no podía ser menos. La que fuera ganadora de Masterchef Celebrity apareció en el plató del espacio del de Requena con un conjunto tan sexy como arriesgado.
Un estilismo tan sexy como arriesgado para pisar el plató de El Hormiguero
Con kimono de terciopelo estampado en color negro de Coosy; combinado con un crop top nude de Zara y unos pantalones de tiro alto y efecto piel también de la marca más conocida de Inditex; la hermana de Ana Boyer nos dejó a todos con la boca abierta. Y es que el estilismo lograba mezclar algunas de las tendencias del momento con muchos de los clásicos más infalibles. Como siempre hace, la colaboradora usó sencillas joyas de Tous y se subió a unas sandalias plateadas con taconazo de Lodi, creando un conjunto elegante pero sorprendentemente sexy y arriesgado.
Lo de sexy lo decimos por motivos obvios. Todo lo que sea enseñar el abdomen y el escote consigue desprender esa sensualidad que tanto nos gusta y Tamara Falcó, aunque llena de ternura e inocencia, lo hace de la mejor forma. Lo de arriesgado, no obstante, puede parecer algo menos evidente. Sin embargo, no hay más que detenerse unos segundos, analizar cada pieza del look por separado y luego el conjunto de manera global para darse cuenta. La colaboradora más estilosa de la televisión, con este estilismo, se ha atrevido a combinar diferentes estilos, algunos prácticamente opuestos, con un resultado de diez. Pantalones de cuero de estética roquera, kimono de inspiración asiática y sandalias de charol futuristas. Un look de lo más inesperado con el que, de nuevo, la hija de Isabel Preysler vuelve a hacer de las suyas y enamorarnos por completo.