Las colaboradoras de Sálvame están enfrentadas por sus colecciones de joyas. Aquí te las mostramos y comparamos, ¿con cuáles te quedas?
El enfrentamiento de Belén Esteban y Anabel Pantoja va camino de convertirse en el ¿Qué fue de Baby Jean? patrio. La película magistralmente interpretada por Bette Davis y Joan Crawford que daban vida a las hermanas Jane y Blanche Hudson. Un enfrentamiento que trapasó la ficción como quedó reflejado en la serie Feud, de Ryan Murphy. Puede que Belén y Anabel no sean divas de Hollywood, pero si son dos estrellas de la televisión y de las redes sociales, que han visto cómo su amistad se ha roto por culpa de unas joyas.
Belén lleva muchos años siendo uno de los personajes más queridos de la televisión y su fama le ha llevado a diversificar y probar suerte en otros terrenos. Primero fue una colección de zapatos, luego las velas aromáticas para decorar el hogar y ahora ha sido su primera colección de joyas que se comercializan bajo su propio nombre, Belén Esteban, un proyecto con el que está muy ilusionada.
Por su parte, la sobrina de Isabel Pantoja también ha aprovechado su tirón en las redes sociales (con más de un millón cuatrocientos mil seguidores) para crear su propia línea Lueli Jewelry by ANABEL PANTOJA.
Las similitudes entre ambas joyas
Ambas son colecciones de joyas sencillas y minimalistas, tendencia total para llevar varias combinadas. Diseños bañados en oro y de plata, con pequeñas piedras de colores a un precio medio, en la misma línea del las diseñadas por otras influencers y conocidas firmas de joyería.
Estilos similares que han provocado el enfrentamiento y, por ahora, la ruptura de una amistad de años. Y, según la propia Belén, fue Anabel quien mostró su descontento a un miembro de la empresa que comercializa sus joyas porque le podían hacer la competencia.
Aquí te mostramos diferentes diseños de anillos, collares y pulseras de una y otra para que decidas cuáles te gustan más. Eso sí, Belén cuenta nada más y nada menos que con la cantante Rosalía como declarada fan... Y eso son palabras mayores.