Hay sandalias que caminan solas hacia el Olimpo de lo deseado. No hacen ruido, no necesitan plataforma, ni pedrería, ni sello viral. Solo un diseño limpio, piel que se nota desde lejos, y esa estética low profile que las convierte en objeto de deseo para las pijitas con ojo entrenado. Las de Irene Urdangarin cumplen todos esos requisitos y, por eso, ya merecen su propio análisis.
Porque no todas las sandalias planas son iguales. Algunas intentan parecer exclusivas con mil detalles innecesarios. Otras se limitan a ser cómodas, sin más. Y luego están esas que dominan el idioma del estilo contenido: sin logos, sin brillo, sin pretensión… pero con mucho fondo de armario con apellido compuesto.
Irene Urdangarin lo deja claro: vestido negro + sandalias planas = el dúo infalible de la elegancia bien aprendida.
(@Gtres)
Lo cierto es que este tipo de sandalia se ha consolidado como el uniforme no oficial de verano entre esa tribu que mezcla gusto clásico con coolness silenciosa. Además, reconozcámoslo: son perfectas para pasear por calles empedradas, ir del mar a la terraza sin cambiar de zapato, o combinar con absolutamente todo sin esfuerzo aparente. Y claro, si las lleva alguien con sangre azul, mejor aún: el manual de estilo se valida solo.
Por eso, si tú también quieres sumarte al club (con o sin título nobiliario), aquí van 4 sandalias planas con ese aire sofisticado, limpio y un poco pijo aspiracional que bien podrían estar en el radar de Irene Urdangarin… y que triunfan sin levantar la voz, pero con todo el estilo. ¡Fíchalas!
Sandalias con tiras en contraste, de Zara
(@ZARA)
Estas sandalias negras de Zara no necesitan colores ni ornamentos para destacar: lo hacen solas, con su diseño de tiras cruzadas y esas costuras blancas que le dan un toque gráfico inesperado. Son el tipo de calzado que encaja igual en un paseo por el centro de Madrid que en una tarde de galería en Berlín. Su estética es limpia, firme y sin concesiones al capricho: una apuesta segura para las que dominan el arte del menos es más sin caer en lo aburrido.
La suela plana y el cierre al tobillo suman puntos de comodidad sin perder ni un gramo de estilo. Y aunque gritan practicidad, sus líneas rectas y su contraste en blanco y negro las elevan automáticamente a 'pieza con intención'. Perfectas para combinar con lino crudo, pantalones de pinzas, o vestidos camiseros. Una elección que entiende de equilibrio, estilo y detalle bien medido.
Sandalias talón cubierto, de Mango
(@Man
Hay sandalias que no buscan llamar la atención, pero terminan capturando todas las miradas. Y estas de Mango Selection son una de ellas. Su diseño en piel negra, con tiras finas en forma de T y sujeción delicada al tobillo, destila una estética pulida, sobria y tremendamente refinada. Es el tipo de calzado que no interrumpe un look: lo completa con precisión.
Una opción ideal para estilismos relajados pero cuidados, para vestidos camiseros de lino, monos fluidos o incluso ese pantalón recto que adoras en verano. Livianas, sutiles y prácticas, tienen ese tipo de belleza que no necesita adornarse para imponerse. Además, su aire silencioso pero seguro las convierte en las aliadas infalibles para quienes practican el estilo con naturalidad, sin necesidad de recalcarlo, como Irene Urdangarin.
Sandalias con pieza metálica, de Massimo Dutti
(@Massimo Dutti)
Si estas sandalias hablaran, dirían algo como: “sí, soy cómoda… pero también sé a qué colegio fuiste”.
Firmes, sencillas y con hebillas metálicas que aportan ese puntito de carácter, estas sandalias de Massimo Dutti mezclan discreción y confianza con el equilibrio exacto que toda 'pijita bien' reconoce al instante.
Son la opción ideal para recorrer ciudad con paso decidido y estilo casual. Para ir de brunch, de museo, o de paseo con tu madre por la Castellana sin que te moleste ni el zapato ni la conciencia estética. Y sí, podrían estar perfectamente en el radar de Irene Urdangarin: funcionales, con clase y preparadas para cualquier plan royal con dress code relajado.
Sandalias tiras cruzadas, de Mango
(@Mango)
Si tu lema de estilo es “menos drama, más diseño”, estas sandalias de piel negra con tira cruzada de Mango son tu match veraniego. Con una forma envolvente, cierre sutil en dorado y acabado limpio, tienen todo lo que buscan las amantes del minimalismo bien hecho: líneas puras, funcionalidad y ese twist de sofisticación que nunca falla.
Es de esas sandalias planas que no necesitan acompañamiento: lo elevan todo solas. Funcionan con vestidos midi, con conjuntos monocromos, con vaqueros blancos y con camisas de popelina. Además, tienen ese aire de fondo de armario bien pensado que, sinceramente, podría haber fichado perfectamente Irene Urdangarin si se diera una vuelta por Mango.
Una opción impecable para las que dominan el arte de combinar discreción y estilo sin despeinarse. Ni demasiado clásicas ni demasiado modernas: simplemente ideales para vivir el verano como una insider… pero en sandalias planas.