El 22 de diciembre es un gran día por la ilusión, los nervios y la suerte. Aunque los dos primeros dependen de nosotros, lo segundo siempre se ha dicho que no. Ni siquiera con la Inteligencia Artificial es posible saber qué número será el afortunado en la Lotería de Navidad, una cuestión que hemos abordado en SEMANA. Al igual que los amuletos y supersticiones que podrían acompañarte durante el gran día, una cuestión que nos lleva a hacernos otras preguntas. Por ejemplo, cómo es posible ganar no solo una, tampoco dos, sino hasta tres veces un juego del azar como este.
No ha sido en España, sino en Estados Unidos, donde Kevin Phillips y su mujer ganaron tanto en el año 2024, en el 2016 y en el 2019 varios millones de dólares. Pero no, no fue casualidad. En los dos primeros años fue él y en el último su esposa quienes compraron los rasca y gana, lo que les llevó a convertirse en millonarios. Pero ¿cuál es la historia que se esconde tras ellos?
Teniendo claras las probabilidades de que suceda algo así, que son mínimas, el truco está en jugar todas las semanas. De hecho, en 20 años se habrían gastado unos 15.000 euros, desembolso que, en su caso, le ha salido muy a cuenta. Y es que han ganado 3 millones de dólares, lo que les permite vivir de maravilla. No solo en cuestiones económicas, también por el hecho de ser unos afortunados, pues hay poquísimas posibilidades de que suceda algo así. Menos todavía si recordamos que a ellos les ha sucedido hasta en tres ocasiones.
Con este importante patrimonio, la pareja ha aprovechado para hacer cambios en su vida como jubilarse o donar dinero a varias asociaciones de animales. También han ayudado a algunos amigos o familiares que tenían ciertas necesidades, un concepto del que te hemos hablado en SEMANA como el complejo 'Papá Noel'. Es Lara Fereiro, nuestra psicóloga de cabecera, la que nos habla del sumo cuidado que hay que tener para no perder la cabeza.
"De repente te toca la lotería y tienes entre manos una gran suma de dinero. Entonces, quieres repartir tu fortuna entre amigos o familiares, pero así hay gente que se arruina y que pierde todo. Lo despilfarran y puede ser problemático al perder el control total. Luego hay tensiones familiares y comparaciones que, sin querer, te pueden llevar a la bancarrota", nos explica la experta.
Esto sucede, en muchos momentos, por la subida de dopamina, un sentimiento que es completamente temporal y, por tanto, puntual: "Cuando gastas también pasa. Esa bioquímica contribuye, siendo muchos los que tienen miedo a ser vistos como personas egoístas. Te presionan un poco a compartir". Por esa razón, da varios consejos, aunque el más importante de todos es tener un presupuesto para ayudar al resto, ya que si no no tendría fin.
Otro de las recomendaciones más valiosas es esperar entre tres y seis meses para gastar grandes cantidades, pues ese tiempo te habrá servido para saber qué es verdaderamente necesario y qué se debe solo a un impulso. Por el momento habrá que esperar para descubrir si tú, tus amigos o tus familiares sois los próximos afortunados de esta Navidad.