Juan Avellaneda vive en una impresionante casa de arquitectura moderna situada en el término de El Maresme, en Barcelona. El diseñador de moda reside en esta vivienda de lujo que cuenta con dos plantas, un gran jardín exterior con piscina y unos espacios interiores de diseño donde predomina el estilo minimalista y los tonos tierra. Te contamos todos los detalles.
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Situada en la exclusiva urbanización de El Maresme, en Sant Vicenç de Montalt, la vivienda se es todo un ejemplo de arquitectura contemporánea. La estructura de dos plantas destaca por sus líneas rectas y una fachada completamente blanca, construida a base de cubos que enfatizan su estilo minimalista. Grandes ventanales y balcones a distintas alturas permiten una espectaculares vistas panorámicas desde cualquier estancia de la casa al entorno natural que rodea la vivienda.
Para acceder a la casa, hay que atravesar un pasillo de lleno de vegetación que conduce al jardín exterior de la vivienda que da la bienvenida la hogar de Juan Avellaneda. El jardín exterior es la antesala de la vivienda. Unas pequeñas escaleras conducen a la entrada principal, cuya superficie está cubierta por una tarima de madera oscura que sustituye al césped tradicional, combinando diseño y funcionalidad, ya que esta tarima también se distribuye alrededor de la piscina como tarima antideslizante. La vegetación cuidadosamente seleccionada aporta frescura y vitalidad al espacio, mientras que detalles y elementos decorativos como velas blancas colocadas sobre bandejas metálicas aportan una mayor sensación de elegancia, comodidad y sofisticación.
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El interior de la vivienda refleja la filosofía, el estilo y la personalidad de Avellaneda: un minimalismo cálido donde cada elemento tiene su razón de ser. La paleta cromática predominante es el blanco, lo que amplifica la sensación de luminosidad y espacio. Los materiales nobles y el mobiliario de diseño a medida están presentes en cada estancia y en cada rincón, evidenciando una cuidadosa selección que equilibra funcionalidad y estética. El salón, que está unido al comedor, se compone de un gran espacio diáfano donde la luz natural es la protagonista, gracias a los amplios ventanales que permiten una conexión visual constante con el exterior. El mobiliario, de líneas sencillas y tonos neutros, combinan a la perfección con el estilo de la casa y ayudan a transmitir un ambiente de calma y elegancia. Elementos decorativos seleccionados aportan personalidad sin recargar el ambiente, manteniendo el estilo minimalista de Jaun Avellaneda, como libros de moda, revistas, pequañas esculturas de madera y flores naturales.
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La cocina es un ejemplo de cómo la funcionalidad puede ir de la mano con el diseño. Esta estancia está equipada con muebles fabricados a medida, que destacan por sus materiales de alta calidad con maderas pulidas y piedras barnizadas, y por su distribución que aporta un extra de funcionalidad al espacio. La cocina mantiene la paleta de colores del resto de al vivienda y está totalmente equipada con electrodomésticos de alta gama.
Para Juan Avellaneda, el dormitorio principal de la vivienda es un oasis de descanso y paz donde siguen predominando los tonos tierras y el uso de la luz natural fusionada con el diseño. Esa simplicidad minimalista en el diseño, Juan Avellaneda la combina con detalles que aportan más calidez, como textiles en tonos suaves y piezas de arte cuidadosamente seleccionadas.
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El dormitorio principal cuenta con un impresionante vestidor en forma rectangular con armarios de gran medida de madera de nogal pulida en tonos oscuros, con cajoneras y baldas perfectamente organizadas por tipos de prendas y colores. Este elegante espacio, es sin duda, uno de los espacios favoritos del diseñador de moda.
Los baños mantienen la línea minimalista de la vivienda, con un diseño que prioriza la funcionalidad sin sacrificar el diseño. El uso de materiales de calidad, como el mármol, y una paleta de colores neutros siguen creando un ambiente relajante, ideal para el cuidado personal y la desconexión.
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En la planta superior, una amplia terraza ofrece un espacio privilegiado para disfrutar de las vistas al mary la naturaleza que rodea la vivienda del diseñador de moda. Además del impresionante jardín exterior con el que cuenta y el porche cubierto que tienen situado al lado de la piscina, Juan Avellaneda cuenta con una tercera zona 'chill out', de estilo boho en la azotea de la vivienda. Un espacio muy elegante con mobiliario de exterior donde puede disfrutar de momento al aire libre con vistas panorámicas a la Ciudad Condal sin salir de casa.
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La vivienda de Juan Avellaneda es más que una casa, es un auténtico reflejo de su personalidad, de suestiloy de suvisión del mundo. Cada rincón, cada detalle, ha sido pensado para crear un ambiente donde la belleza y la funcionalidad se entrelazan, ofreciendo un refugio de paz y sofisticación, predominando el diseño y los ambientes acogedores.